Los tornados que desde el pasado domingo azotan el centro y el sur de EE.UU., y que han ocasionado al menos 38 muertes en los estados de Oklahoma, Iowa, Arkansas, Misisipi, Alabama y Tennessee, mantenían ayer en alerta a la costa este del país, ante posibles lluvias intensas, informó el Servicio Nacional de Meteorología.

En la jornada del miércoles pasado, los estados más afectados por las inundaciones fueron Florida –donde murió una persona– y Alabama, pero también pudieron verse las consecuencias de las fuertes lluvias en el área de la capital de la nación, Washington, y en Baltimore (Maryland).

Toda el área de la ciudad de Nueva York estaba ayer en alerta ante posibles inundaciones por las intensas lluvias, precipitaciones fuertes que también podrían caer en Jacksonville (Florida), Charlotte (Carolina del Norte), Virginia Beach (Virginia) y Atlanta (Georgia).

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Varios carros quedaron semienterrados en un socavón que se abrió ayer en una calle de una zona residencial de Baltimore, en el estado de Maryland (este). No hubo víctimas en este estado por las lluvias.

En Alabama, donde cayeron también grandes cantidades de lluvia, el agua llegó de manera tan repentina que los ciudadanos tuvieron que subirse a los muebles o esperar en las terrazas de sus casas para ser rescatados. Hubo cerca de 30 rescates en el área metropolitana de Mobile. En Gulf Shores, donde en 24 horas cayeron casi 533 milímetros de lluvia (21 pulgadas), el escenario recordaba el pasado miércoles temprano el paso de un huracán.