El sacerdote Jeremy Pemberton, de 58 años, podría enfrentarse a acciones disciplinarias de la Iglesia anglicana tras convertirse en el primer religioso de ese credo que contrae matrimonio con un hombre, según publica la prensa británica.

Pemberton, divorciado y con cinco hijos, es el primer clérigo que protagoniza un matrimonio gay en el Reino Unido y ya se mostró partidario en 2012 de que, si la Iglesia anglicana no permitía las bodas gais, los miembros de otras congregaciones pudieran casar a homosexuales en otros lugares.

Después del enlace con un hombre de 51 años, que se celebró este sábado en un hotel, el sacerdote agradeció en su cuenta de Twitter el apoyo y los buenos deseos que había recibido y publicó una foto en la que aparecía con su pareja, rumbo a su luna de miel.

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"Quiero a este hombre y quiero casarme con él, eso es lo que quiero. Es lo mismo que cualquiera que desee casarse", afirmó Pemberton en declaraciones al diario "Daily Mail" después de la ceremonia.

El clérigo pertenece a la diócesis de Lincoln pero es capellán de un centro sanitario, es decir, está empleado por el Sistema Nacional de Salud del Reino Unido (NHS, en sus siglas en inglés) y, según relata "The Guardian", el arzobispo de su diócesis, el reverendo Christopher Lowson, no podría despedirlo aunque quisiera.

El arzobispo reconoce que el clérigo le había escrito una misiva en la que le contaba sus intenciones y que posteriormente se reunieron y le explicó las normas del arzobispado.

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"La Iglesia anglicana iniciará próximamente discusiones para decidir qué respuesta da a los matrimonios del mismo sexo. Yo me he comprometido a participar en ese proceso con un espíritu de honestidad e integridad, con el objetivo de distinguir el espíritu de Dios del trabajo en la iglesia y de entender la naturaleza del matrimonio en el futuro", afirmó Lowson en declaraciones recogidas por "The Guardian".

El arzobispo de Canterbury, Justin Welby, y el de York, John Sentamu, habían advertido con anterioridad en varias ocasiones de que la introducción de matrimonios del mismo sexo en el Reino Unido tendría consecuencias en la disciplina de la Iglesia anglicana.

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Los primeros matrimonios homosexuales en Inglaterra y Gales se celebraron en marzo, auspiciados por el primer ministro británico, el conservador David Cameron, que se enfrentó a las críticas dentro de su partido y de la oposición, y los enlaces gais en Escocia se implantarán también este año.

Al aprobar la ley del matrimonio homosexual en el Reino Unido en diciembre de 2012, el Gobierno británico declaró ilegal que la Iglesia anglicana oficiara bodas entre personas del mismo sexo, debido a la fuerte oposición que presentaron la Iglesia de Inglaterra y la de Gales.