El gobierno de Ecuador desplazó a la frontera con Colombia a un grupo de técnicos que verifica desde este sábado el cumplimiento del compromiso adquirido por el vecino país del norte de no fumigar cultivos ilícitos con glifosato en una franja de exclusión de 10 kilómetros, informó la cancillería.

Los especialistas deberán comprobar que no hay presencia del herbicida en territorio ecuatoriano, tomando muestras de suelo, agua y vegetación, así como dando seguimiento al estado de salud de los habitantes del área, informó un comunicado.

Este y otros trabajos de vigilancia que se realizarán durante un año en distintas localidades de la zona fronteriza común buscan garantizar la aplicación correcta del acuerdo entre ambas naciones y por el cual Ecuador desistió de la demanda contra Colombia ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya (CIJ).

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El grupo de expertos trabajará inicialmente en la zona de San Lorenzo, en la provincia de Esmeraldas, unos 318 kilómetros al noroeste de Quito. La misión la integran miembros del Ministerio de Defensa, Instituto de Investigaciones Agropecuarias, Laboratorio de Ecotoxicología del Ministerio de Energía Renovable y Cancillería.

En septiembre del 2013, Ecuador aceptó retirar la querella en la CIJ, luego de que Colombia se comprometiera al pago de 15 millones de dólares para el fomento de desarrollo de las poblaciones de la frontera.

También se estableció una zona de exclusión para las aspersiones aéreas de 10 kilómetros para el primer año y con posibilidad de reducción en caso de que una comisión binacional compruebe científicamente que el glifosato no afecte ni llegue en ninguna circunstancia al territorio ecuatoriano.

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También se definió el tipo de aeronaves que, de acuerdo con su velocidad y altura de vuelo, podrían utilizarse para la fumigación dependiendo incluso de la velocidad del viento y la temperatura.

Ecuador reclamó por las fumigaciones que realizó Colombia entre el 2000 y 2006 afectando a la población y al ambiente por la utilización del glifosato, señalando que sus componentes químicos son tóxicos y matan organismos vivos.