Eran las 12:40 del jueves pasado y el movimiento de entrega de paquetes era acelerado en la empresa Expresito Carga, en la avenida de las Américas.

Tres operadoras se encargaban de localizar en bodega y entregar la mercadería a una decena de usuarios en el mostrador del área de atención al cliente de este courier.

A la vez, Aníbal Galarza, representante legal de la empresa, supervisaba la clasificación de los paquetes y mientras observaba las estanterías llenas de bultos señaló que para esta época el movimiento se incrementa un 30%, aunque mencionó que el tránsito de paquetería se empezó a acelerar en octubre, cuando manejaba 1.400 unidades por semana, ahora su promedio es de 2 mil paquetes.

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Según Mario Cuvi, presidente de la Comisión de Couriers de la Cámara de Comercio de Guayaquil, por lo menos el 25% de las compras que ingresan al país en esta época son manejadas a través de estos negocios.

Durante un recorrido de este Diario por varios couriers de Guayaquil, se constató que el movimiento se incrementó en algunos casos hasta el 50%, como afirmó Bertila Palacios, operadora de la agencia de Geomil Express, ubicada en el centro comercial Bahía Norte.

“En días normales se entregan unos 20 paquetes, pero ahora, en esta época de Navidad y fin de año, suben a 40 y más”, expresó Palacios.

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El tiempo de entrega, en estas empresas, desde que se receptan los paquetes en las oficinas en el exterior, es de un mínimo de 8 días y un máximo de 22, dependiendo del lugar de origen y del tráfico aéreo.

En tanto, en el courier Box Express, el movimiento se ha incrementado el 10%. Esta empresa recepta y envía paquetes desde y hasta Estados Unidos.

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Miriam Alvarado, contadora del negocio, señaló que transporta alrededor de una tonelada de carga mensual.

Sin embargo, este año a más del movimiento acostumbrado para esta temporada, los couriers encaran un nuevo reglamento para Tráfico Postal Internacional y Mensajería Acelerada, vigente desde el 28 de noviembre pasado.

Esto les ha hecho tomar precauciones para evitar sanciones del Servicio Nacional de Aduanas del Ecuador (Senae), debido, en especial, al art. 12, que declara a los couriers solidariamente responsables por la veracidad y la exactitud de los datos que declare el remitente.

Alvarado señala que han optado por recibir, en sus oficinas en el exterior, los paquetes abiertos para ser revisados y cerrados ante el cliente.

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En tanto, Galarza reconoció que ahora se autolimitan en la recepción de paquetes, sobre todo de ropa, mercadería donde son más frecuentes las inconsistencias en las declaraciones de algunos usuarios.

Señaló que para su empresa es muy difícil realizar el aforo físico (abrir paquetes) del 100% de la mercadería para constatar la veracidad de lo declarado.

Al respecto, Mario Pinto, subdirector general de Normativas de la Senae, indicó que la entidad solo tiene capacidad de aforo físico del 15% de la carga que llega a puertos y aeropuertos, “por eso se identifican perfiles de riesgo para determinar qué tenemos que abrir” e instó a los couriers a realizar la misma estrategia. “Nadie les obliga a abrir el 100% de paquetes”.

Responsables solidarios

El artículo 12, literal h, señala que los ‘couriers’ deben ser: “solidariamente responsables con el consignatario por la veracidad y exactitud de los datos declarados, el cumplimiento de las formalidades aduaneras y el pago de multas que se generen por este concepto... El procedimiento sancionatorio podrá ser iniciado en contra del consignatario o en contra de la empresa courier...”.