La Refinería de Esmeraldas, la mayor de Ecuador de 110.000 barriles diarios de petróleo (bdp), opera a mitad de su capacidad tras un incendio registrado el mes pasado en una de sus unidades, pero espera normalizar sus niveles de procesamiento durante la primera semana de enero, dijo este lunes Petroecuador.

La refinería tuvo que parar dos Unidades de Crudo el 28 de noviembre por un incendio originado en el área de bombas, lo que obligó a la planta a reducir su capacidad de procesamiento a niveles mínimos.

Pese a tener una capacidad de 110.000 bpd, la refinería usualmente opera a un 85 y 90 por ciento.

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"Actualmente estamos procesando entre unos 50.000 y 55.000 barriles diarios. A partir del 6 de enero alcanzaremos paulatinamente los niveles normales", dijo un portavoz de la estatal Petroecuador.

La segunda Unidad de Crudo de la refinería entró en operación desde el 2 de diciembre, mientras que la otra (Unidad de Crudo 1) hará lo propio el 6 de enero, según datos de la Gerencia de Refinación de Petroecuador.

Las autoridades dijeron que el incendio no afectó la unidad de Craqueo Catalítico Fluidizado (FCC, por sus siglas en inglés), la más importante de la refinería, y continuaba operando normalmente.

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Debido a la antigüedad de su infraestructura, la refinería de Esmeraldas con frecuencia se ve afectada por incidentes que obligan a paralizar sus operaciones, por lo que el Gobierno aplica un programa de modernización.

No obstante, el despacho de derivados se ha realizado con normalidad en las últimas semanas.

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La mayor parte del plan oficial de modernización se ejecutaría a partir de abril del 2014 con la suspensión programada de unidades de la refinería. El plan ha sido postergado en varias ocasiones.

El programa incluye además una paralización total de la refinería por unos 40 días mientras se cambian algunos equipos importantes.