Ayer, decenas de personas se aglomeraron en el hospital Básico de Atuntaqui para ser atendidas por una intoxicación luego de haber ingerido pollo asado en un local de esa zona.

Vómito, fiebre, escalofrío y dolor de estómago fueron los síntomas que presentaron unas 100 personas que acudieron durante el fin de semana y ayer, en diferentes centros de salud del cantón Antonio Ante.

Cristian Granizo, uno de los afectados, denunció verbalmente ante autoridades que presuntamente el aliño se lo utilizaría para varios días y que esa sería la causa de su intoxicación. “El sábado compré un cuarto de pollo y en la noche sentí dolor fuerte de estómago. Tengo escalofrío y vómito. El aliño no lo botan y vuelven a sazonar los pollos con el mismo condimento”, dijo.

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Junto a él, en la sala de emergencia, María Valdivieso pedía a las enfermeras que atendieran a su hijo de 13 años, quien presentaba una fiebre de 39°.

“Mi hijo tiene dolor intenso de estómago y fiebre. El domingo él ha comido en el local de pollos”, explicó María.

Efrén Reinoso, epidemiólogo de la Dirección Provincial de Salud de Imbabura, explicó que solamente el día domingo tenían el registro de atención de al menos 50 ciudadanos intoxicados de diferentes edades.

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“Hemos atendido a las personas y enviado medicamentos. Hasta el momento no hemos registrado casos de consideración y no se ha hospitalizado a pacientes”, manifestó Reinoso.

Al ver que los familiares de los afectados presentaron sus quejas ante la Policía y la Comisaría Municipal, el comisario Julio Lima acudió hasta el asadero de pollos y verificó que los permisos de funcionamiento estaban caducados, por lo que inmediatamente clausuró el local.

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“Se receptaron denuncias. Se tomaron muestras y se harán investigaciones sobre la masiva intoxicación”, aseguró Lima.

Los propietarios del asadero cerraron las puertas y no dieron versiones sobre las denuncias.