El presidente boliviano Evo Morales (i) entregó una estatua de tres metros del difunto líder venezolano Hugo Chávez a la amazónica ciudad de Riberalta y llovieron las críticas.

Riberalta guarda luto por la muerte de ocho pasajeros en un accidente aéreo el domingo y esperaba un carro de bomberos y extintores, ya que cuando se incendió la aeronave los vecinos apagaron las llamas con barro y ramas.