El martes pasado las embarcaciones que se dedican a la captura de pescados pequeños retomaron sus actividades después de un mes de veda, regulación que les impedía la captura de variedades como caritas y hojitas, así como de corvinas. Ubaldo Campoverde, representante de la asociación pesquera Posorja, dice que la restricción se da dos veces al año en marzo y septiembre.

Durante el último mes, comenta que el precio de la corvina (que sí se podía pescar con embarcaciones artesanales) llegó a $ 2,50 la libra (entera) en la venta al mayorista. Esta asociación entrega directamente a vendedores en mercados como Caraguay.

En agosto, la libra especie estuvo en $ 0,90. Campoverde señala que entre 10 embarcaciones pequeñas se puede capturar una tonelada de pescado y con las medianas llegan a 3 toneladas por bote.