El fiscal general, Galo Chiriboga, viajó ayer a Panamá, según afirmaron fuentes de su despacho. Su traslado coincide con los intentos judiciales por evitar la concesión del asilo político al exasambleísta de Sociedad Patriótica (SP) Galo Lara.

La defensa del exlegislador planteó ese pedido a la Cancillería panameña el lunes pasado; al momento, esperan una respuesta de las autoridades.

Chiriboga partió a las 06:00 y tenía previsto volver por la noche. Lo acompañaron el ministro del Interior y Policía, José Serrano; y el viceministro de Relaciones Exteriores e Integración Política, Marco Albuja.

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Con ellos, 11 técnicos de distintas dependencias, publicó en su web el diario La estrella de Panamá. Agregó que el ministro panameño de Relaciones Exteriores, Fernando Núñez Fábrega, indicó haber recibido a las autoridades ecuatorianas, quienes informaron sobre los delitos que supuestamente pesan sobre Lara, y la causa judicial que se le sigue en el país.

Días atrás, Chiriboga dijo que la orden de captura inmediata contra Lara fue emitida por la jueza de la Corte Nacional de Justicia (CNJ) Ximena Vintimilla, cuando dictó su resolución en el caso del triple crimen en Quinsaloma (Los Ríos).

Ayer, el exasambleísta señaló (vía telefónica) que las autoridades de Panamá nunca lo detuvieron, sino que lo retuvieron 24 horas “hasta confirmar la alerta roja de la Interpol. Yo entré legalmente a Panamá...”.

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Lara no quiso revelar la forma y la fecha en las que salió del Ecuador. Además, justificó el incumplimiento de la prohibición de abandonar el país, diciendo que recibió amenazas.

Entrada

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“Nunca estuve detenido... entré legalmente a Panamá...”, dijo el exlegislador gutierrista Galo Lara, al indicar que sus abogados gestionan la concesión del asilo político.

Corte Nacional

El presidente de la Corte Nacional de Justicia, Carlos Romero, afirmó que una vez que una de las salas del organismo pide la difusión de la clave roja la gestión de detención pasa a manos de la Interpol.

Acusación

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Lara fue sentenciado a diez años de cárcel por su supuesta complicidad en el triple crimen de Quinsaloma.