Santos propone referendo sobre la paz con las FARC

El presidente Juan Manuel Santos anunció este jueves un proyecto de ley para un referéndum en las elecciones de 2014 en el que los colombianos decidirían si aprueban o no los puntos que eventualmente se acuerden en las conversaciones de paz con las FARC.

"El proceso de paz avanza. Las conversaciones en La Habana avanzan. Y tenemos la responsabilidad, la obligación de prever cualquier instancia que sea necesaria si los acuerdos se formalizan, para que el pueblo colombiano... sea quien tome la última palabra, quien decida si esos acuerdos a que lleguemos son aceptables o no", aseguró el mandatario durante un evento en la Casa de Nariño, la sede del gobierno.

Por eso, explicó el jefe de Estado, "hay un proyecto de ley estatutaria que hemos considerado necesario presentar ante el Congreso con mensaje de urgencia para poder facilitar el proceso de refrendación de esos acuerdos".

El presidente precisó que el proyecto de ley busca que los referendos relacionados con los acuerdos finales para poner fin al conflicto con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia se puedan presentar en un día que coincida con las elecciones, ya sea de congresistas o de presidente.

Los comicios para el Congreso están previstos para marzo de 2014 y los presidenciales para mayo del mismo año. Según Santos, el objetivo es que los jurados de votación les entreguen a los electores el tarjetón relativo al referéndum sobre el proceso de paz.

Sin embargo, la propuesta del gobernante pareciera estar escasa de tiempo para cumplir con los términos que exigen las leyes de Colombia en materia de referéndums.

Consultado telefónicamente por The Associated Press, el jurista Rodrigo Escobar Gil, ex presidente de la Corte Constitucional, explicó que si se está hablando de un referéndum, "veo difícil que los términos alcancen porque un referéndum tiene que ser convocado mediante una ley de la república".

Según Escobar, la ley estatutaria de la que habla Santos, aunque se tramite con toda rapidez, estaría saliendo en diciembre del Congreso, en enero entraría a la Corte Constitucional para su revisión y las elecciones serían en marzo. Así, no habría tiempo suficiente.

Apenas se conoció el anuncio del mandatario, las voces en favor y en contra no se hicieron esperar.

El senador Juan Carlos Vélez, del Partido Social de Unidad Nacional, también llamado Partido de la U, dijo por teléfono que "esta es una estrategia electorera del presidente Santos para poder sacar adelante sus listas al Congreso (y) está modificando las reglas del juego".

Según Vélez, el objetivo de Santos "es amarrar el apoyo de un referéndum al apoyo de unas listas al Congreso. Es una trampa, es un engaño a la ciudadanía".

Escobar Gil dijo que existe una norma que dice que un referéndum no puede coincidir con un día de elecciones.

En el lado opuesto al senador Vélez, el congresista Augusto Posada, también del Partido de La U, defendió telefónicamente todo lo propuesto por Santos.

"Es un mandato de todos los colombianos buscar la paz... Es muy importante que sea el pueblo colombiano el que refrende, a través de un referéndum, si quiere la paz o no con el grupo al margen de la ley de las FARC", dijo Posada. "No tengo ninguna duda de que esta iniciativa será aprobada por todos los colombianos".

Para Posada, Santos no está cambiando las reglas de juego cuando propone someter el eventual referéndum el mismo día de unas elecciones de 2014 porque, en su concepto, el objetivo es evitarle al erario un gasto de casi 200.000 millones de pesos, equivalentes a unos 104 millones de dólares, que es lo que, según Posada, cuesta la realización en Colombia de cualquier tipo de elecciones populares.

En tanto, Clara López, presidenta del izquierdista Polo Democrático Alternativo, que apoya el proceso de paz, expresó vía telefónica su cautela con el anuncio de Santos y sostuvo que le pidieron una reunión para conocer toda la información sobre el tema.

Para López, el proceso de paz con las FARC y el aval popular de lo que eventualmente se acuerde en Cuba, "es una iniciativa estratégica para el país sobre la cual no nos podemos pronunciar en un vacío de información".

El expresidente Álvaro Uribe (2002-2010) también expresó su opinión sobre el tema y, a través de su cuenta de Twitter, indicó que el referendo para el terrorismo es maniobra de presión del gobierno para "distorsionar elecciones de Congreso y de presidencia".

Los proyectos de ley estatutaria requieren en el Congreso de cuatro votaciones con mayoría calificada en las dos cámaras, es decir, la mitad más uno de los legisladores votantes.

Las leyes colombianas, asimismo, estipulan que un referéndum requiere para su aprobación del 25% del censo electoral actual. En las últimas elecciones para alcaldes, gobernadores, concejales y diputados, de octubre de 2011, el censo electoral era superior a los 30 millones de colombianos en capacidad de votar. Así las cosas, en caso de que el referéndum se lleve a cabo, éste necesitará de unos 7,5 millones de votos.

Desde fines del año pasado, el gobierno de Santos y las FARC adelantan en Cuba un proceso de paz para tratar de poner fin a casi 50 años de confrontación entre las partes.