El presidente de la República, Rafael Correa, anunció que da por terminado unilateralmente el acuerdo bilateral de protección forestal con Alemania, mediante el cual Berlín se sumaba a la iniciativa Yasuní-ITT.

El mandatario dio a conocer esta resolución durante un encuentro con periodistas nacionales y extranjeros que fue transmitido en directo la noche de este martes por los canales del Estado.

Correa señaló que la decisión se toma en rechazo "a la insolencia de funcionarios de tercer nivel que no han sido desmentida por funcionarios de primer nivel" del gobierno alemán. "Ahora vienen con esta insolencia, a querer darnos clases de cómo conservar el medioambiente, a entrometerse en decisiones soberanas. !Eso indigna!", declaró Correa visiblemente enojado

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"Señores: quédense con su plata. Rechazamos unilateralmente el convenio, sabremos salir adelante sin la prepotencia de ciertos países que siempre se han creído los dueños del mundo. He ordenado que devuelvan hasta el último centavo y damos unilateralmente por terminado el convenio con Alemania", agregó el mandatario ecuatoriano.

Previamente, el portavoz del Ministerio de Cooperación Económica y Desarrollo de Alemania, Sebastian Lesch, había señalado que la responsabilidad exclusiva del fracaso del proyecto ecológico Yasuní ITT era del presidente Rafael Correa.

Lesch agregó que Alemania procedería a revisar la validez de un acuerdo de protección forestal con Ecuador, tras la decisión de Correa de iniciar la explotación petrolera en el Yasuní.

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Correa aseguró que el gobierno alemán siempre se opuso a la iniciativa que buscaba dejar sin explotar el petróleo del bloque ITT, en el Yasuní, pero que por presión de la sociedad y el parlamento dio 34,5 millones de euros para un programa especial de conservación de la reserva.

Según el mandatario, ese dinero nunca ingresó al fideicomiso internacional que fue conformado para recaudar fondos para impedir la explotación en el Yasuní. Ecuador apenas consiguió aportes por 13,3 millones de dólares, el 0,37% de la meta prevista.

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El mandatario anunció el pasado jueves que ponía fin a la iniciativa Yasuní-ITT, que buscaba dejar bajo tierra el crudo del ITT a cambio de una compensación internacional, y aseveró: “el mundo nos ha fallado”. Alegó que “el mundo es una gran hipocresía, pues la lógica que prevalece no es la de la justicia sino la del poder”.