Una de sus mayores satisfacciones fue lograr, después de un año y medio de lucha, que se les devolvieran las casas a 16 familias que en el 2010 fueron desalojadas en la cooperativa 30 de Abril de la isla Trinitaria.

“Luchamos, hicimos la quematina, quemamos llantas, y logramos que el Gobierno les devuelva una casa en la Prosperina, en julio del año pasado”, recuerda Guillermo Leones, un dirigente que dice haberse enamorado de la lucha social y comunitaria desde las aulas universitarias, hace veinte años.

Dirige la Coordinadora Unitaria Barrial del Ecuador (CUBE) en Guayaquil, pero ha estado ligado a las organizaciones barriales desde 1994. Primero fue coordinador de la Fedebas (Federación de Barrios Suburbanos), luego trabajó como coordinador en la CUBE hasta octubre del año pasado cuando asumió la presidencia.

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“Mi satisfacción es haber ayudado a mucha gente, tener mejores servicios en Plan Piloto, en la isla Trinitaria”, dice Leones, aunque esto le haya significado muchas veces desatender a su familia, renunciar a sus estudios universitarios o sobrevivir sin plata, “con una mano adelante y otra atrás”.

La CUBE aglutina a 23 comités barriales y tiene unas 2.300 personas afiliadas, indica. Su zona de mayor influencia se encuentra en el suburbio, Perimetral, Prosperina, Bastión Popular, Flor de Bastión.

En cada sector, Leones defiende intereses barriales. La semana pasada, por ejemplo, recogía firmas para presentar escritos ante la Comisión de Tránsito del Ecuador y pedir que se restablezca el servicio de transporte de la línea 70 en el suburbio oeste, medida que –señala– afecta a los vecinos.

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Ahí también hace gestiones ante el Ministerio de Salud para crear un centro gerontológico que atienda las necesidades de la salud de las personas de la tercera edad, y ha enviado comunicaciones para que el Municipio considere el diseño de un parque lineal aéreo que garantice las viviendas de las familias que habitan en las riberas del estero Salado.

“Tenemos un proyecto para dotar de computadoras con internet, queremos hacerlo con el apoyo del Municipio en un 50% y otro 50% lo ponga la familia”, explicó Leones, quien se considera ideológicamente de izquierda, “pero no la izquierda del Gobierno”. Está afiliado al Movimiento Popular Democrático, pero dice que no duda en dialogar con todas las tendencias para beneficio barrial.

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Este exjugador del Club Sport Norteamérica y seleccionado de fútbol del Guayas en la década del ochenta también lucha por la legalización de terrenos de quienes se han asentado en zonas marginales de Guayaquil, como Monte Sinaí o la isla Trinitaria. “Hay unas 30 mil familias pendientes de legalizar en Monte Sinaí y unas 320 en Trinitaria”, precisa el dirigente.

También reúne apoyo para defender tres subcentros de salud que funcionan en el suburbio y que él asegura que el Gobierno intenta eliminar: Héroes del 41, en las calles 19 y la Q; Veintiocho de Febrero, en la 23 y segundo callejón; y La Laguna, en la 27 y callejón R.

“En la universidad me enamoró la actitud de luchar para que se resuelvan las necesidades de la gente en la ciudad, los problemas comunitarios”, confiesa Guillermo Leones.

Perfil

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EDAD

49 años.

PROFESIÓN

Cursó hasta segundo año de Sociología en la Universidad Estatal de Guayaquil.

CARGOS

Exempleado del Departamento de Aseo de Calles del Municipio en la década del ochenta. Trabaja en la Fundación de Negros y Mestizos del Ecuador Ana Daniel Williams, en las calles Colón y Chile.

FAMILIA

Casado con Julia Lindao Andrade. Tiene un hijo.

Política

Afiliado al Movimiento Popular Democrático (MPD).