El cuerpo de Ramón Ricardo Rezabala Ulloa, de 35 años, fue encontrado a las 22:30 del sábado en el interior del Parque Samanes, ubicado en la avenida Francisco de Orellana, al norte de Guayaquil. 

El cuerpo presentaba un disparo en el abdomen. Un agente de policía señaló que Rezabala se encontraba con vida cuando fue hallado en el parque y que él indicó que le dispararon. Posteriormente él falleció.

El segundo crimen ocurrió una hora después (23:30) en el suroeste de Guayaquil. Cristhian Adoni Monroy Rosero, de 18 años, murió anoche tras recibir cuatro impactos de bala, por parte de personas que se movilizaban en una camioneta de color rojo.

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El joven se encontraba en los exteriores de un local donde se realizan bailes populares, en la cooperativa Cenepa de la Isla Trinitaria.

Según testigos, Monroy intentó escapar pero las personas lo interceptaron y dispararon. Aún con vida fue trasladado a una tricimoto, pero murió en el camino. 

Cristian Cruz, conductor de la tricimoto, indicó que él pasaba por el sector donde había ocurrido la tragedia, cuando varias personas lo obligaron a detenerse para subir al herido, pero tras avanzar dos cuadras el chico murió y quienes lo obligaron a parar huyeron del vehículo.

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"Como estos señores me dejaron con el muertito en la tricimoto decidí ir al UPC para dar a conocer la novedad, pero ahora me llevan para investigaciones, no sé por qué", indicó Cruz, conductor del medio de transporte.

El cabo de policía Carlos Córdova indicó que el cuerpo de Monrroy fue trasladado en una tricimoto hasta la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) ya sin vida. "Trataron de pedir auxilio en el UPC, pera ya era tarde, el joven estaba muerto sobre la tricimoto", dijo el uniformado.

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Según familiares del occiso, Monrroy llegó hace 1 año de España, donde está su madre junto a sus dos hermanos y como le gustó Ecuador decidió quedarse.