Tarima y pantalla gigante para el ‘primer servidor de la patria’
En el programa del oficialismo por el Día del Trabajador, que se realizó ayer en la Plaza de San Francisco, así como el verde de Alianza PAIS reemplazó al ‘rojo socialista’ de antaño, se sustituyó al protagonista: la imagen del obrero, de overol y casco, dio paso a la del “primer servidor público”, el “primer trabajador de la patria”, como se repetía de vez en cuando por el micrófono y a cada rato en los grupos que llegaban con la silueta de un hombre dibujada en banderas, afiches, pancartas y camisetas. Ese protagonista era Rafael Correa, el presidente.

Hasta que llegue, músicos entonaron su repertorio. A las 12:45, Correa ya estaba allí, en la tarima. Marcelo Solórzano, del sindicato de los trabajadores eléctricos, le dio la bienvenida. Primero saludó a los trabajadores y le dijo al presidente que revisara unos decretos que han provocado la división del movimiento sindical y luego se autojustificó: “Hay quienes nos critican por ser correístas, pero nos sentimos orgullosos de ser de este Gobierno”, gritó.

Entonces el micrófono pasó a manos del “primer trabajador de la patria”, quien dominó el escenario. Y repitió el discurso sobre el éxito de la revolución, con las respectivas actualizaciones de datos. Entre otros, destacó que la remuneración básica es de $ 318, que la tasa de desempleo es la más baja de la historia, que los salarios reales son los más altos de la región, que se eliminó la tercerización, que ha crecido la Seguridad Social... Y criticó al capital, a su juicio, causante de una crisis planetaria.

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Y destacó, a la vez, el papel del mercado, calificó como un error el negarlo con fines políticos, en clara alusión a los movimientos de izquierda que, tres cuadras más abajo, a esa misma hora, lo estaban cuestionando, por ejemplo, por los negocios del Estado con las mineras y los despidos en el sector público.

“Tuvimos que comprar renuncias de acuerdo a la ley, con el justo pago. ¿Ustedes creen que eso le agrada a uno?, ¿que eso lo hace uno por deporte’... Lo hacemos por el bien común”, dijo Correa, ya en sus últimas palabras, cuando muchos, luego de firmar en una lista, se empezaban a ir.

La marcha comenzó multitudinaria. Al menos seis cuadras de gente inició la caminata desde el parque El Arbolito. Pero muchos se quedaron en el camino y la plaza apenas se llenó hasta la mitad.

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A los costados, los turistas querían tomar fotos de la iglesia, pero era imposible: una enorme tarima, con dos torres de parlantes y una pantalla gigante lo impidieron.

En Guayaquil, los simpatizantes del oficialismo usaron camisetas verdes con distintas leyendas; unos destacaban los nombres de asambleístas y otros de las centrales de AP.

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Por megáfono también se agradecía el apoyo de “los compañeros” del Ministerio de Salud Pública y los de Agricultura”. La gobernadora Viviana Bonilla defendió que servidores públicos se unieran a la marcha que, dijo, fue organizada por Alianza PAIS, “porque ellos también son trabajadores” y acotó que también estaban allí muchos del sector privado.

 

Peligro para nuestro proyecto es el ecologismo infantil, izquierdismo infantil, indigenismo infantil. No me he equivocado..., es esa falsa izquierda.Rafael Correa Presidente de la República

 

Trabajadores pidieron a Rafael Correa sancionar abusos patronales
A la movilización de los grupos que reclamaron al Gobierno del presidente Rafael Correa mejoras en sus políticas laborales se sumaron ayer quienes en los últimos días han perdido su fuente de empleo. Ellos pidieron al régimen que sancione el no pago de utilidades, liquidaciones y una jubilación justa. Entre esos grupos estaban excolaboradores de la empresa incautada Maxigraf, compañía en manos del Estado que está en proceso de liquidación.

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La caminata, que se inició pasadas las 08:30 y se extendió hasta las 11:30, recorrió el centro de Guayaquil. En el trayecto se mostraron pancartas que exigían al Ejecutivo que ponga “mano dura” para evitar abusos del empresariado y despidos intempestivos por reclamar sus derechos.

“El administrador de este país nos sigue mintiendo”, señaló Johnny Carrasco, representante de los despedidos de Maxigraf y quien también preside la Federación Democrática de Trabajadores del Guayas, organizadora de la jornada.

Él expresó que el Gobierno, a través del Ministerio de Relaciones Laborales, ofreció a mediados de abril que ese mismo mes estaría solucionado el tema de pago de liquidaciones de los cerca de 300 empleados de esa empresa que fueron despedidos intempestivamente.

Por eso cuestionó al mandatario por ofrecer plazas en Ecuador para los migrantes en España cuando en el interior del país “no se resuelven” los problemas laborales.

A la movilización se sumaron los grupos de la Unidad Plurinacional de las Izquierdas: MPD, Pachakutik, Red Ética y Democrática, Poder Popular. Además, la agrupación Salud y Trabajo que busca el registro político, organizaciones sociales, populares y miembros de comités de trabajadores de distintas instituciones.

En la tarima, ubicada en 9 de Octubre y Lorenzo de Garaycoa, las intervenciones marcaron distancia con Correa y le exigieron la aprobación de leyes como la de Seguridad Social y el Código Laboral.

Octavio Loyola, presidente de la Coordinadora en Guayas, pidió que los beneficios laborales se amplíen al 45% de la población subempleada.

Mientras, Jaime Del Valle, presidente del Frente Popular, expresó que la clase obrera aún no alcanza “la libertad social y política”. Agregó que es necesario mantener la unidad de las organizaciones sociales para defender los principios de los trabajadores del país.

En Quito, la convocatoria de los sindicatos movilizó a trabajadores, indígenas y políticos de oposición hasta la plaza de Santo Domingo, en el Centro Histórico, donde cuestionaron los resultados del régimen con el argumento de que se ha intensificado la flexibilización laboral y se ha dividido a las organizaciones obreras.

Mesías Tatamuez, presidente de la Confederación de Organizaciones Clasistas Unitarias de Trabajadores, destacó la participación de unos 4.000 obreros y lamentó los supuestos intentos de boicot del Gobierno, del que dijo se apropió de la tradicional Plaza de San Francisco y el uso de fondos públicos para una mayor asistencia.

 

Un gobierno como el de Rafael Correa tiene en su agenda decretos antiobreros. Aún los trabajadores no alcanzamos la libertad social y política.Jaime Del Valle Presidente del Frente Popular

 

Otras manifestaciones
Pedidos en acto oficialista en Guayaquil

Moradores de las cooperativas Monte Sinaí, Sergio Toral, entre otras, pidieron con carteles “no más desalojos” y “legalización”. Trabajadores eléctricos exigían “homologación digna y justa”.

En provincias, marchas a favor y en contra
En las capitales de Azuay, Loja, El Oro y Tungurahua se vivió el mismo ambiente polarizado. En todas hubo marchas a favor y en contra del Gobierno, sin mayores incidentes.