Con el lanzamiento de juegos pirotécnicos, decenas de fieles a bordo de más de cuarenta canoas participaron la mañana de este sábado en la procesión fluvial al Señor de los Milagros, conocido como Cristo Negro, en el cantón Daule.

La imagen de Cristo Negro lideró la navegación que partió a las 10:00 desde la iglesia de la cabecera cantonal para cumplir con un recorrido fluvial de unos siete kilómetros hasta el recinto Naupe.

Los devotos fueron cantando y orando durante la navegación que duró alrededor de una hora, tras detenerse en varias estaciones donde se montaron altares con la imagen del Cristo. En cada una era recibido por el tronar de juegos pirotécnicos.

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A su llegada al recinto, decenas de fieles, entre esos agricultores, esperaron a la imagen que continuó en procesión hacia la iglesia. Varios pedían por sus cultivos, salud y que se detengan las catástrofes naturales.

La devoción a esta advocación se celebra desde hace cuatro siglos, cuando un hacendado ciego encontró la imagen en la ribera del río Daule. Al encomendarse a la figura, recuperó la vista, según relatos históricos. (I)

 

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