Nuevo Amanecer es el nombre del proyecto de la iglesia rectoral San Josemaría Escrivá, ubicada en el km 7,5 de la avenida Samborondón, que consiste en la construcción de una parroquia para los moradores de Socio Vivienda I y II, donde hay 60.000 habitantes.

José Marroquín, párroco de la iglesia, explica que la iniciativa nace a petición del sacerdote encargado de dicha parroquia, quien después de la venida del papa Francisco, en julio del 2015, oficia las misas en el lugar utilizando una estructura metálica hecha con vigas, que se usó justamente en la ceremonia que dio el papa en el parque Samanes.

Es así como desde inicios de este año un grupo de fieles de la iglesia San Josemaría Escrivá está consiguiendo donaciones con empresas vinculadas con el negocio de la construcción para poder iniciar la obra gris, así como donaciones económicas que hasta el momento han generado un monto de $ 50.000.

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Con el fin de recaudar fondos el pasado domingo 25 la iglesia realizó un evento de integración familiar con música, venta de comida y actividades de entretenimiento.

La parroquia nueva, que se llamará Beato Álvaro del Portillo, se levantará en un terreno de 5.000 metros cuadrados, que fue entregado en comodato por parte del Ministerio de Inclusión Económica y Social, MIES, tendrá una iglesia para 400 personas, casa parroquial y aulas para catecismo.

Lo primero será terminar con el cerramiento del lugar, para luego seguir con la colocación de bloques de cemento sobre la estructura metálica, lo que según Marroquín estaría listo en unos tres meses.

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A inicios del 2018 se tiene previsto terminar con la iglesia para seguir con el resto de la obra que tardará unos dos años. (I)