Cientos de velas iluminaron y dieron calor la noche de ayer a los devotos de San Juan, que cada año cumplen con el tradicional baño en la playa de San Lorenzo, en Salinas, provincia de Santa Elena.

La actividad de fe se cumple desde hace más de 16 años en este balneario y se trata de la recordación del nacimiento de Juan el Bautista. Con el paso del tiempo no solo son más los asistentes, sino que ahora, antes del Baño de San Juan hay presentaciones culturales, procesión y misa.

Tal como es costumbre, familias, vestidas de blanco, tomadas de la mano caminaron de espaldas hacia el mar diciendo: “San Juan, San Juan, yo creo en tus aguas benditas, así como bautizaste a Jesús, renueva mi bautizo”, se sumergieron tres veces por el pedido de tres deseos y finalmente salieron del agua para degustar de los alimentos que llevaron previamente preparados.

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El ritual no toma más de 5 minutos y los asistentes describen la experiencia como única. No importa el frío de la media noche, ya que aseguran que lo que sienten durante el ritual es un fuego vivo en su ser.

“Es algo hermoso, uno sale renovado, lleno de fe y esperanza”, dijo Martha Suárez.

Tras el ingreso al mar varios juegos artificiales iluminaron el cielo. Además, hubo quienes prepararon una lista de lo malo que les pasó durante el año y la quemaron como símbolo de dejarlo atrás y olvidado, e hicieron otra lista de nuevos propósitos que es guardada como un recordatorio de lo prometido.

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Desde hace tres años el Cabildo de Salinas difunde esta actividad que atrae a turistas de Quito y Guayaquil. (I)