Después de hacer deporte como correr o nadar, los músculos quedan muy estresados y recogidos, por eso es necesario estirar para evitar dolores y calambres. Con las posturas de yoga de relajación se logra un buen estiramiento. Además, se activa la circulación sanguínea, se evita la hinchazón de los pies, mejora la respiración y se tranquiliza la mente.

“Yoga significa el camino hacia el descubrimiento del alma y la unión con ella”, expresa Maggie Murillo, entrenadora.

Esta rutina la hizo Maggie junto con sus alumnas de yoga de La Serena. Se debe realizar durante 30 minutos después de entrenar y mantener cada postura 30 segundos, como mínimo.

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Entre las recomendaciones que da Maggie a la hora de ejercitarse con yoga constan: mantener una buena respiración, poner atención a nuestro cuerpo, respetar las limitaciones del cuerpo y también de la mente, es decir, no seguir si hay cansancio. Añade que no es necesario sudar cuando se realizan las posturas para pensar que están haciendo bien los movimientos. “Cada cuerpo es diferente y lo que se necesita es constancia y disciplina”.

También se debe evitar movimientos bruscos en el momento del estiramiento, respirar bien, alinear bien el cuerpo y concentrarte en las posturas, dice la entrenadora.

Para una buena combinación entre el yoga y el entrenamiento se debe evitar la comida grasosa y alimentarse con fruta, verduras, vegetales y beber mucha agua.

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Los ejercicios que compartimos en esta rutina debes hacerlos con ropa cómoda y sobre una alfombra para que no te lastimes. (D)