Con un celular en la mano, haciendo que la fila de estudiantes de tercero de bachillerato del colegio Monte Tabor se detuviera un poco, una abuelita tomaba fotos de su nieto luciendo su capa azul con amarillo y su birrete.

Entre aplausos de familiares, docentes y miembros de la directiva del centro educativo, los 85 alumnos que integran la cuarta promoción del plantel hacían su ingreso al salón principal del Teatro Sánchez Aguilar para la ceremonia de clausura de la etapa escolar.

Desde el inicio del acto las palabras emotivas de dirigentes cautivaban la mirada de los alumnos, quienes con atención escuchaban y aplaudían con furor.

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Uno de los discursos más emotivos fue el de la estudiante Adriana Pérez, quien recibió el premio Padre José Kentenich, por reflejar en su vida diaria el espíritu de los valores institucionales.

“Cuando tienes compañeros que se volvieron amigos y amigos que se volvieron hermanos, es difícil sentirse sola. Hoy comparto este escenario con mi segunda familia....”, expresó Adriana en su discurso, lleno de emotividad .

Durante la ceremonia se entregaron otros premios: Al Mérito Deportivo, a Camila Romero, y al mejor puntaje de BI, a Leonardo Falquez, Juan Diego Zambrano y Guido Chiriboga, quien además recibió un reconocimiento a la excelencia académica. El premio a mejor bachiller se entregará más adelante.

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De una forma alegre Roberto Maspons, director general del plantel, alentó a los jóvenes a ser valientes y a enfrentarse al mundo. “Lo vivido en el colegio no va a determinar el éxito o el fracaso en la vida, lo que marca la diferencia es establecer metas y mostrar actitud para alcanzarlas”, enfatizó.

Un momento muy emotivo que provocó ovación de los casi 700 espectadores fue la intervención musical de los estudiantes: Anna Manrique, Genoveva Gómez-Lince, Mónica Larrea y Emilio Mackliff con la guitarra. Los demás estudiantes acompañaron las melodías con aplausos. (I)

Estoy feliz de saber que así como nosotros encontraremos muchos desafíos en el mundo, el mundo encontrará en nosotros personas desafiantes, con ganas de dejar huella”.Adriana Pérez, Estudiante