Laura Pausini cumplió su promesa a Guayaquil

La promesa de Laura Pausini de cantar en Guayaquil se cumplió. Aquella deuda asumida por la italiana el 28 de agosto del 2016, en Quito, quedó más que saldada para sus fans, la noche del sábado en el coliseo Voltaire Paladines Polo, en donde fueron ocupadas todas las localidades.

El reloj marcaba las 21:00 y las luces se apagaron, era la señal que cientos de fanáticos esperaban para ver a Pausini en el escenario. Nadie ha dicho fue el primer tema que interpretó, este sencillo también es el primero de su más reciente producción discográfica Hazte sentir.

"Buenas noches Guayaquil. Estoy supercontenta de realizar este sueño de conocer (...) Ecuador las promesas se mantienen y ya me tienen aquí", fueron las primeras palabras de la cantante, de 44 años,  para sus fans, y enseguida cantó E.STA.A.TE, en español, hay una versión en italiano.

El espectáculo, en el que el público coreó eufóricamente cada una de las canciones, siguió con Primavera anticipada, Mi respuesta y Las cosas que vives, al terminar esta última hizo una pausa y nuevamente interactuó con los fans, que previamente, pasada las 20:00, recibieron al cantante guayaquileño Gianpiero, quien interpretó Tengo la noche, Kizumbia y Serena.

"Gracias. Es que no sé qué decir, hemos empezado hace poco tiempo (con la gira), ya hemos pasado por algunas naciones del mundo y disculpen gana Ecuador, mis orejas tiemblan, mis orejas son felices, gracias, muchas gracias por estar aquí a cada uno de ustedes. Canté ahora Las cosas que vives, las cosas que yo vivo son ustedes, son mi público, mi gente (...)", afirmó muy emocionada y sorprendida por la energía del público.

La cantante comentó que han pasado 25 años desde que empezó a cantar, del primer disco. Reiteró que es la primera vez que se encuentra en esta parte del mundo, en Guayaquil, al mismo tiempo señaló que no le gusta las cosas a medias. "Creo también que las cosas se hacen cuando es el momento y el momento mío esta noche es aquí, con toda la gente de Guayaquil", indicó.

El repertorio, que se basó entre sus temas más recientes y del recuerdo, continuó con Verdades a medias, Inolvidable, Escucha atento, Lado derecho del corazón y La soledad, al finalizar de interpretar este tema dijo: "quiero que mi hija (Paola) antes de irse se acuerde de que está escuchando esta canción (...) Todas las noches cuando nos vamos a dormir me dice mamá el concierto de esta noche del uno al diez, estuvo ocho o esta noche fue seis, es una niña de cinco años, pero sabe bien cuando queda el diez y esta noche lo hará (...)", aseguró.

Quiero decirte que te amo y Fantástico completaron el repertorio de los primeros 45 minutos de concierto. Pausini se retiró del escenario momentáneamente, en su ausencia sus músicos interpretaron temas en inglés.

Antes de las 22:00, la italiana retornó al escenario con otro vestuario, la chaqueta negra fue reemplazada por un vestido debajo de las rodillas del mismo tono, acompañado de un cinturón dorado, el pantalón negro también cambió mas no el color.

El turno fue de El valor de seguir adelante y Como si no nos hubiéramos amado. Tal como lo hizo en la primera hora del espectáculo, en cada pausa que realizaba Pausini compartía reflexiones, sobre el amor y otros valores, sin dejar de lado la interacción con los asistentes, con quienes la química fue desde la primera canción. Contó que este concierto fue grabado por su equipo de producción, el objetivo compartir "afuera" y mostrar a Guayaquil, Ecuador.

Bienvenido fue la siguiente canción, cuando concluyó agradeció al público que viajó desde lejos para presenciar el concierto. En su caso dijo que al primer concierto que asistió fue a uno que ella misma realizó hace tiempo atrás.

La solución, Amores extraños, Se fue, para interpretar este tema, la italiana invitó a una fan del público y Volveré junto a ti hicieron parte de la versión acústica.

Entre tú y mil mares, Víveme, Escucha tu corazón, Dispárame, dispara, Escucha tu corazón y Emergencia de amor fueron parte de un popurrí. Al finalizar esta parte, la cantante salió del escenario y sin hacer esperar mucho al público retornó con nuevo traje, esta vez un vestido de tono claro e interpretando Nuevo.

Llegando ya casi a la recta final, interpretó En cambio no, por unos minutos se creía que llegaba a su fin el espectáculo, pero la italiana no defraudó a quienes pidieron "otra, otra, otra". El final definitivo de un poco de más de dos horas fue con Nadie ha dicho, en la versión que interpreta junto con los cubanos Gente de Zona.

Casi al final de la canción la cantante, con otro vestuario, presentó a sus músicos, agradeció a sus fans por la energía y mencionó que este concierto fue dedicado para una niña que quería estar junto a los cientos de asistentes, pero que "desafortunadamente (falleció), se llama Elizabeth, te quiero Elizabeth, el concierto entero es tuyo mi amor, en cualquier sitio que estés, este aplauso es de tu gente de Guayaquil", dijo, y acotó que no se olvidará de la noche que le recibió Guayaquil, "te quiero mucho, hasta pronto, chao", fueron las últimas palabras de Pausini al despedirse del escenario, pasada las 23:00.

Familia de Laura Pausini en el concierto

En una entrevista concedida a este Diario Laura Pausini (en mayo) comentó que su familia la acompañaría en la gira y así fue. En el escenario estuvo su esposo Paolo Carta; su hija Paola entre el público; y detrás del escenario su padre Fabrizio Pausini como parte de la producción de la artista.

Él caminaba entre el público que se encontraba en la localidad de sillas VIP junto a Pierangelo, quien también trabaja con la cantante. 

Muchos asistentes reconocieron al progenitor de la artista, y si no había la foto de cerca con Laura, con su padre sí fue posible, incluso con él conversaban. El señor Pausini y Pierangelo resaltaron la calidez, la hospitalidad de los latinos, en este caso de los ecuatorianos. (E)