Comida y una buena conversación son dos elementos que no pueden faltar cuando los Morales Rosales se juntan. “Siempre buscamos que una de las cosas que nos motive a reunirnos sea precisamente compartir la mesa, porque nuestras mesas las disfrutamos, pero las sobremesas las disfrutamos más porque son largas, conversamos y exponemos muchísimas cosas de cada uno de nosotros”, cuenta Carlos Víctor Morales sobre la relación con su familia.

El gusto por la comida y el que solo sepan cocinar “unos deliciosos cubos de hielo” son dos de las facetas con las que más se identifica Carlos Luis con sus cuatro hijos. Martha (28), la tercera de los Morales Rosales, dice que no solo es el hecho de que disfruten comer, sino que en cada salida Carlos Víctor siempre busca enseñarles algo, de allí que cada vez que van a una “hueca” este les cuenta desde la historia de alguno de los platillos que degustan o de cómo surgió el local al que van o qué había antes allí.

Ahora, la oficina de su hija mayor, Karla Morales (30) es uno de los lugares predilectos para sus encuentros. La abogada en derechos humanos afirma que tanto ellos como su padre siempre se dedican un tiempo para hablar “de la vida, del trabajo o de cualquier cosa” y que luego este “amigo acolitador” como cual expreso los lleva a la casa.

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Carlos Andrés, el menor de todos (27), define a su padre como “el mejor”, como el que los ha salvado de “muchas travesuras”. Refiere que de él, quien es parte del staff de 100% Fútbol de TC Mi Canal, han tomado siempre como ejemplo su responsabilidad, honestidad, su pasión al momento de luchar por lo que quiere, su calidad de persona. Asegura que siempre les enseño a “jugar como un equipo”.

El cine, la música y el fútbol son otras actividades que disfrutan en común. Con su segunda hija Gloria (29) no se pierden un solo partido del Barcelona. (I)