El juego por segunda fase de la Copa Libertadores que El Nacional quedó eliminado ante Atlético Tucumán tuvo tintes políticos por la gestión a cargo de Luis Juez, embajador de Argentina en Ecuador.

El papel de Juez para que se dispute el partido fue clave, según versión del diplomático a medios argentinos a los que les dijo que al final del duelo en el Atahualpa, los futbolistas del Atlético Tucumán “me abrazaban a mí, y yo ni jugué”.

“Me van a querer cargar a trompadas. Ellos (El Nacional) tenían ganado el partido en el escritorio y les mojamos la oreja y les ganamos”, dijo Juez en diálogo con la cadena TN.

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Juez reveló una “discusión terrible con el presidente del club (Tito Manjarrez), que es un militar”, pero justificó que todo fue por el sueño tucumano en su primera Libertadores.

“Entendí que no podía seguir el manual del correcto diplomático porque para Atlético Tucumán era un sueño. Yo no les podía fallar”, expresó.

El embajador acompañó a la delegación del aeropuerto al estadio. “Fue una odisea. Los fui a buscar a la manga y corrimos al colectivo. Viajamos al estilo Rápidos y furiosos 7, se rompió el radiador del colectivo dos veces. El equipo no tenía uniformes, se probaron camisetas de la sub-20 y a algunos les quedaban chicas”, detalló. (D)