Los resultados son los que mandan y estos dicen que en las primeras 19 jornadas el Sevilla sumó más puntos (42) y consiguió más victorias (13) que en cualquier temporada de su extensa historia, en la primera vuelta, en la liga española.

El argentino Sampaoli ha convertido un grupo competitivo por naturaleza –ganar tres Europa League seguidas con todas sus eliminatorias está al alcance de pocos– en un equipo que enamora. Ha añadido fe a un conjunto acostumbrado a ganar. Ahora se creen que el límite solo lo marca el cielo.

Por eso esperan adueñarse de la cima cuando visiten al Espanyol, que marcha noveno. Un triunfo en Barcelona los pondría arriba del Real Madrid (líder con 43 unidades), que atraviesa una mala racha de resultados y de juego, y que tendrá un duro adversario en el Santiago Bernabéu: la Real Sociedad, de San Sebastián.

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Soñador argentino
No le importa al Sevilla quién esté delante. Las mil caras de su innegociable estilo no se lo permiten. La victoria es la meta y los caminos para llegar a ella radican en el “protagonismo desmedido” que proclama su entrenador. Por eso, este Sevilla es el equipo de moda que ningún espectador imparcial se quiere perder. Que lleve los mismos goles en casa que de visita (21) es un indicativo más de qué aporta este equipo al fútbol español. Y todo dibujado en la mente de un soñador argentino, al que nunca le han dicho que hay cosas imposibles.

El FC Barcelona, tercero en la tabla de posiciones (41), estará al acecho el domingo, cuando visite al Betis. (D)