Nico Rosberg salió con el puño en alto cuando la Fórmula Uno regresó a México en 2015, luego de 23 años de ausencia. Esta temporada, el premio podría ser incluso mayor.

El piloto alemán (331 puntos) de Mercedes puede conquistar su primer campeonato mundial si gana el domingo en el Autódromo Hermanos Rodríguez y su compañero de equipo Lewis Hamilton no       queda entre los nueve primeros. El británico lo escolta a 26 puntos, a tres carreras del final de temporada.

“Tengo grandes recuerdos de lo que pasó el año pasado porque tuve mucho apoyo de la afición”, dijo Rosberg ayer en rueda de prensa. “Pero ganar el campeonato no depende solo de mí. Para mí es algo muy simple, tengo que ir por la victoria y pensar en las cosas que puedo controlar”.

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Con 23 triunfos y 54 podios de por vida, Rosberg quizá es uno de los mejores pilotos en la historia sin ser campeón, algo que parece que cambiará este año. Al germano le bastan dos segundos lugares y un tercero en las últimas tres pruebas y sería campeón por primera vez sin importar lo que haga Hamilton, con quien desde el año pasado no lleva la mejor de las relaciones.

“La atmósfera en general es buena dentro del equipo y con los mecánicos. Creo que hay mucha emoción por esta batalla que estamos combatiendo”, agregó Rosberg. “Yo no pienso mucho en eso (su rivalidad con Hamilton), yo trato de hacer lo mío y sacar el mejor resultado posible, pero desde luego que es tenso. Yo trato de concentrarme en lo mío y nada más”.

Pero Hamilton, como mostró el fin de semana pasado al ganar su séptima carrera de la temporada en el GP de Estados Unidos, no dejará de pelear mientras tenga posibilidades. (D)