El presidente de la Federación Internacional de Atletismo (IAAF), Sebastian Coe, advirtió ayer que borrar todos los récords mundiales y empezar de cero es “tentador”, pero “ensuciaría a los atletas limpios”.

“Sé que algunos récords son verdaderas barreras, especialmente en el atletismo femenino, en ciertas disciplinas”, récords que se remontan a “30 o 40 años, que probablemente no fueron establecidos de forma legítima”, admitió Coe, doble campeón olímpico de 1.500 metros (1980 y 1984).

Pero borrar todas esas marcas sería injusto para los atletas que los batieron sin recurrir al dopaje, insistió el dirigente al ser preguntado por la propuesta lanzada por el patrón de la Federación Inglesa de Atletismo de anular todos los récords del mundo para evitar la sospecha generalizada.

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“Hay que ser prudente, aunque comprendo la frustración de algunos”, añadió Coe. (D)