Cuando el motocrosista australiano Robbie Maddison, de 34 años, dice que va a hacer algo, es mejor que los demás lo crean.

Reconocido por realizar temerosas y extremas acrobacias con su moto, Maddo, como le dicen sus amigos, es hasta el momento, la única persona capaz de surfear olas montado en su propia moto.

Para lograr este reto, adaptó en una moto KTM 250 SX de dos tiempos un par de esquíes, uno en cada llanta. Pero eso no es todo, la llanta trasera de la moto fue cambiada con una de 16 paletas, similares a las que usan las motos para montar dunas en el desierto.

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Esta es una de sus mayores hazañas hasta el momento. En una entrevista para Surfer Magazine, reconoce que temió por su vida durante parte del rodaje en el mar, sobre todo cuando la ola más grande (12 metros) rompió tras él, en la Polinesia Francesa.

En el sitio web TransWorld Motocross, Robbie cuenta cómo fue toda su hazaña.

“El agua dulce es mucho más difícil y más densa”, dice Maddo. “El agua salada es más suave y ofrece menos tracción para el neumático, y la moto es más boyante, también”. dijo.

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El mecánico que aplicó los instrumentos a la moto, Buddy Morgan, dijo: “La forma y el ángulo de los esquíes y el número de paletas en el neumático trasero hizo la diferencia”.

Una vez lista la moto, una lancha tuvo que halarla para que tome mayor velocidad y poder surfear la ola más grande de Tahití.

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Maddison también ha saltado el puente londinense Tower Bridge, con un backflip o el canal de Corinto en Grecia. (D)