Un rejuvenecido Manny Pacquiao tratará de terminar rápido con el estadounidense Chris Algieri mañana en Macao para defender con éxito su cinturón del peso wélter de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) y aumentar sus posibilidades de enfrentarse al también norteamericano Floyd Mayweather.

Parece difícil que el filipino, pleno de confianza y rodeado de 300 personas de su entorno, encontrará problemas para batir a su rival.

“Algieri será superado por la velocidad de Manny muy rápido”, predijo ayer el entrenador de Pacquiao, el norteamericano Freddie Roach. “Manny quiere vencer con un nocaut”.

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Su adversario estadounidense de 30 años (20 triunfos y sin derrotas) es un antiguo kickboxer de Long Island, cuyo objetivo es ser doctor en el futuro.

En junio anterior, Algieri se recuperó de dos caídas en el primer asalto y terminó venciendo por puntos al pugilista ruso Ruslan Provodnikov. Obtuvo el título OMB de los pesos superligeros.

Ahora quiere derrotar al filipino de 36 años, congresista en la provincia de Sarangani. “Manny va a dormir, irse a casa y luego retirarse”, dijo el preparador de Algieri, Tim Lane.

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Pacquiao, cuyo récord es de 56-5-2, con 38 nocauts, manifestó que su intenso entrenamiento lo ha ayudado a recuperar la agresividad y la potencia con las que superó a boxeadores como Óscar de La Hoya, Érik Terrible Morales, Marco Antonio Barrera, Juan Manuel Márquez, Ricky Hatton y Shane Sugar Mosley.