A los 92 años murió en Guayaquil, el jueves anterior, Héctor Silva, pilar del Norteamérica de los últimos tiempos del amateurismo y los primeros del profesionalismo en Ecuador.

A Silva lo bautizaron Huevero, por su negocio de mayorista de huevos en su barrio de Pío Montúfar y Clemente Ballén. El dirigente Medardo Santacruz lo llevó a Norteamérica, junto a Félix Leyton Zurita, Vicente Villalba y otras figuras.

A Silva lo ubicaron como marcador del alero zurdo y fue una revelación. Jugó con el arquero José Caimán Muñoz, Carlos Pibe Sánchez, Enrique Maestro Raymondi, Galo Papota Torres, Carlos Peralta, Víctor Venado Arteaga y Víctor Lindor. Después se sumaron Daniel Pata de Chivo Pinto, Bolívar Andrade, los hermanos Felipe y Roberto Leyton, Raúl Pío de la Torre, y otras estrellas que llevaron al famoso Norte a ser campeón de 1947 y 1949.

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El Huevero actuó en una era de grandes punteros izquierdos: Guido Andrade, Eduardo Bomba Atómica Guzmán, Santiago Osorio, los argentinos Juan Avelino Pizauri y Óscar Curcumelli y el uruguayo Alcides Aguilera.

En los meses finales de 1951 Silva se fue a Colombia en la era del mítico El Dorado, cuando en el país del norte se jugaba el mejor fútbol del mundo. El guayaquileño fue titular en América de Cali entre 1951 y 1954.