“Yo no cumplo años, cumplo retos”. Esta frase la escribió el pasado miércoles en su cuenta de Twitter el atleta ecuatoriano Millán Ludeña. El mensaje destacó dos hechos valiosos en su vida: el primero, el pasado 22 de abril cumplió 34 años, y el más importante, contar que él es una persona de desafíos.

Bajo ese concepto, Millán compitió y completó seis etapas de una de las carreras más extremas del planeta: la Marathon des Sables (Maratón de las Arenas).

En total recorrió 247 kilómetros a pie. Cronometró 59 horas, 17 minutos y 4 segundos y se ubicó en el puesto 776 de la clasificación general, de entre 1.169 atletas.

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“En la vida no hay límites, sino retos realizables”, reflexionó el ecuatoriano antes de viajar a competir en el desierto de Sahara, en territorio marroquí. Su objetivo era llegar a la meta, más allá del puesto en que se ubicara.

Por ello, apenas terminada la competencia, Millán se observa en un video en el que está muy emocionado y con la bandera de Ecuador en las manos. En un momento el atleta tricolor alza los brazos en señal de triunfo. Había superado tan difícil escollo.

Su reto se inició el pasado domingo 6 de abril. Cargando una mochila de nueve kilos, en la que tenía alimentos –sobre todo energéticos– e implementos –como gafas–, el guayaquileño completó los primeros 34 kilómetros de la prueba. Llegó extenuado y con las primeras señales del esfuerzo realizado: la presencia de ampollas en los pies. Eso no lo amilanó.

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Mas, dejó entrever, no estuvo lejos de lanzar una frase escrita en una red social por un colega suyo: “Maldita carrera de locos”. Solo la retuiteó.

El dolor físico quedó atrás. Y una de sus motivaciones fue escuchar la canción El aguante, de los puertorriqueños Calle 13.

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Aun así, en algunas ocasiones pensó en retirarse. Pero, a través de su logro, quiso dejar el mensaje de que los seres humanos son capaces de todo si se lo proponen.

Un día después de haber terminado la carrera, Millán contó haber perdido 4 kilos de peso. Además del esfuerzo físico, el deportista soportó temperaturas extremas, que en el día, dijo, superaban los 45 grados centígrados y en la noche eran cercanas a los cero grados.

La maratón de Madrid es una las competencias que analiza correr Millán.

Cuando las cosas parecen imposibles, ahí se debe demostrar todo lo contrario. Todo es posible si uno se lo propone.Millán Ludeña, atleta ecuatoriano

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Kilómetros tuvo la etapa más larga de la competencia.

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