Cumpliendo con lo que manda la Ley de Tránsito, me he acercado a renovar el SOAT (Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito) en una de los tantos puntos de venta que hay en la ciudad de Quevedo (y en todo el país), pero al consultar el monto por pagar me señaló el dependiente, que el seguro que yo había pagado el año anterior era falso.

Informándome sobre el tema, descubrí que en mi caso están por igual cientos de personas (quizás miles) que hemos sido estafadas con la venta de SOAT falsificados. Según la oficina del seguro en Quevedo y otra persona propietaria de un punto de venta, el asunto es que se han sustraídos especies originales de SOAT de diferentes aseguradoras, y están siendo vendidas fraudulentamente sin pagar el valor correspondiente al fisco, en diferentes partes del país.

Me he acercado a la Fiscalía de Quevedo a poner la respectiva denuncia contra la aseguradora propietaria de la especie original de mi vehículo, y allí me enteré de que el caso ya es de conocimiento de la Fiscalía, que existen denuncias en Babahoyo y en Quevedo y que en esta ciudad se apresó a dos personas en el local que estaba al lado del destacamento de la Policía por tener material robado relacionado con el SOAT.

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El perjuicio es incalculable teniendo en cuenta que habrá muchos perjudicados que no denuncian y otros que aún desconocen el tema y se irán enterando en el momento que les toque renovar el seguro. El otro asunto paralelo en esta estafa es el perjuicio por los intereses de mora (15% por cada mes impago) a los que se verán obligados a pagar, a más del valor anual del SOAT (producto de la estafa o robo), de no mediar las autoridades pertinentes y la Defensoría del Pueblo.

Quizás me equivoque y alguien me pueda corregir, pero yo no recuerdo haber leído, escuchado o visto alguna noticia o investigación al respecto. Lo que está sucediendo merece una investigación y denuncia de los medios de comunicación sobre la fragilidad del sistema de distribución y venta del SOAT, que no puede, no debe ser vendido en cualquier quiosco donde puedan escanear, falsificar y estafar a los usuarios.

Vicente Auhing Sánchez,
ingeniero civil, Quevedo

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