El disidente cubano Guillermo Fariñas, Premio Sajarov 2010 del Parlamento Europeo, fue arrestado por la policía tras una discusión con los agentes que vigilaban su hogar, informaron este viernes su madre y un activista.

Fariñas, que ha cumplido una veintena de huelgas de hambre contra el régimen, fue detenido el jueves en la tarde frente a su casa en Santa Clara, 270 km al este de La Habana, tras discutir con los agentes de "la patrulla que lo estaba custodiando desde el día anterior", dijo a la AFP su madre, Alicia Hernández.

"El fue a hablar con la patrulla (...) y ahí se formó (una discusión), entonces se lo llevaron detenido", agregó.

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El opositor Elizardo Sánchez, que dirige la ilegal aunque tolerada Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional, dijo que Fariñas fue a conversar con los agentes porque "supuestamente desapareció el laptop (computador portátil) de uno (de los miembros) de su organización".

Fariñas, un sociólogo de 50 años, había sido detenido por última vez el 24 de julio pasado junto a medio centenar de personas en el funeral del opositor Oswaldo Payá, Premio Sajarov 2002, que murió al chocar el auto en que viajaba contra un árbol en el sureste de Cuba, según la versión oficial.

"Nos tiene un poco preocupada, porque su vida (de Fariñas) peligra porque en esas estaciones de policías, ahora como está el asunto de las enfermedades, el lo recoge todo", dijo Hernández en alusión a los brotes de cólera y dengue que hay en la isla.

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"El no prueba ni agua (mientras está detenido), está en un ayuno permanente", agregó.

El jueves también fue detenido el opositor y expreso político José Daniel Ferrer en su hogar en el poblado de Palmarito, Santiago de cuba (850 km al sureste de La Habana), según denunció Sánchez ese día.

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Según Sánchez, las detenciones de opositores en Cuba duran "varias horas o varios días", modalidad adoptada por el gobierno de Raúl Castro, quien sustituyó en el 2006 a su hermano enfermo Fidel Castro.

En julio hubo 406 arrestos de disidentes, según un reporte mensual de la Comisión de Derechos Humanos. Toda oposición es ilegal en Cuba y el gobierno comunista considera a los disidentes como "mercenarios" al servicio de Estados Unidos.