Un grupo de estudiantes de Medicina de las universidades de Guayaquil y Católica Santiago de Guayaquil (UCSG) no podría graduarse como médico si no se renueva el convenio con el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), a través del cual unos 150 de ellos hacen internado en el hospital Teodoro Maldonado Carbo.

Este convenio, firmado el 2 de junio de 1999, fue suspendido el 23 de septiembre pasado por el juez tercero de lo Civil del Guayas, Francisco Alvear, quien falló a favor de un recurso de amparo que presentaron 25 médicos especialistas del hospital para exigir estabilidad laboral y otros beneficios, así dejó “sin eficiencia jurídica” el acuerdo.

Pero uno de los requisitos de las facultades de Medicina nacionales es que los alumnos obtengan experiencia con pacientes haciendo prácticas en centros de salud durante un año.

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Este 1 de abril no pudieron ingresar al hospital unos 40 estudiantes de la UCSG que debían iniciar su internado, por lo que se gestionaron sus prácticas en el Abel Gilbert Pontón.

El trámite fue complicado, ya que cada centro del Ministerio de Salud Pública, del IESS y de la Junta de Beneficencia dentro de su presupuesto tiene destinado un rubro para un determinado número de internos porque les dan un reconocimiento económico, que varía entre una institución y otra.

Pero el ingreso de los jóvenes al hospital del suburbio es una medida “parche”, asegura la directora de Internado de la UCSG, Rocío Santibáñez, ya que en tres meses, cuando finalice el tiempo que demoran las prácticas en las especialidades en las que fueron ubicados, no tendrán dónde adiestrarse. La situación se agrava ya que este año es una de las promociones más numerosas: 93 alumnos.

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Por este motivo surge la suscripción del nuevo convenio ya que, además, en junio próximo otros 500 estudiantes de la Universidad de Guayaquil deben iniciar su internado y cada año 100 de ellos eran recibidos en el hospital del IESS.

Santibáñez y el presidente de la Asociación de Facultades Ecuatorianas de Medicina y de la Salud (Afeme), Pedro Palacios, coinciden en que en este acuerdo se deben establecer varios beneficios para los universitarios como la cantidad de dinero que se les cancelará por sus horas de trabajo, la alimentación mientras cumplan sus turnos y la afiliación al IESS durante el año del internado.

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Pues el apartado 7.1 del convenio de 1999 estipula que “por tratarse de una actividad académica previa a la obtención del título de médico, los estudiantes de la Facultad de Ciencias Médicas que participan en el programa de internado rotativo no tienen vínculo laboral, ni con la universidad ni con el IESS, y en consecuencia no son sujetos de afiliación obligatoria al Seguro Social por cuenta de ninguna de las dos entidades”.

Santibáñez reconoce que previamente no habían tenido inconvenientes con el IESS respecto a los internos. “Es un internado bastante organizado y el IESS es la entidad que más les paga a los chicos”, indicó.

Sin embargo, debido al fallo del juez no se aceptó a la nueva promoción y solo se le permitió terminar sus prácticas a los estudiantes de las dos universidades que ya habían ingresado, ya que en enero pasado hicieron una protesta en las afueras del Teodoro Maldonado Carbo.

Palacios le envió una carta al exdirector del hospital, Carlos Andrade, el 20 de marzo pasado y otra al director regional del IESS, Agustín Ortiz, el 27 del mismo mes para que notifiquen los requisitos de los internos para las próximas fechas de ingreso y solicitando la firma del nuevo convenio, pero hasta el viernes pasado no había recibido respuesta, según Palacios.

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Este Diario trató de comunicarse con Andrade, pero ya no labora en la institución desde hace unas dos semanas y en su puesto está el doctor Francisco Cevallos, quien la semana pasada estuvo en constantes reuniones en Quito y en el hospital.

Horas de trabajo

Cada 72 horas los internos hacen una jornada de 24 horas en los hospitales.

Especialidades

Los estudiantes rotan sus horas de internado entre varias especialidades. Los de la UCSG entre Medicina Interna, Cirugía General, Ginecología y Obstetricia, Pediatría y a partir de este año en Medicina Comunitaria, también conocida como extramural.