La estrategia para el ingreso a Quito es un secreto que los dirigentes de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) no comparten ni siquiera a sus bases.

Dicen que para evitar que la información se filtre al Gobierno mantendrán en reserva la hora y ruta que tomarán para concluir su marcha en el parque El Arbolito.

Esta movilización –que arrancó el pasado 8 de marzo desde El Pangui, en Zamora Chinchipe– ha recorrido ocho provincias en las dos semanas que lleva adelante.

Publicidad

Unas quinientas personas se declararon ayer en asamblea permanente en el coliseo de la parroquia Uyumbicho, cantón Mejía, en las afueras de Quito, donde pasaron la noche tras recorrer más de 500 kilómetros.

Delegaciones de Esmeraldas, Sucumbíos y Santo Domingo de los Tsáchilas llegaron a ese punto para sumarse a esta marcha denominada Por el Agua, la Vida y la Dignidad.

A puerta cerrada debatieron en esta parroquia rural el manifiesto público de 19 puntos que hoy entregarán de manera simbólica a las autoridades de Estado. El análisis se efectuó sin la presencia de los principales líderes indígenas, como los presidentes de la Conaie, Humberto Cholango, y de la Ecuarunari, Delfín Tenesaca; el prefecto de Zamora Chinchipe, Salvador Quisphe, y otros, quienes se trasladaron a Quito para una última reunión de planificación.

Publicidad

Cholango ratificó que llegarán al parque El Arbolito por el norte y sur de la ciudad.

El titular de la Federación Única de Trabajadores del Seguro Campesino, Byron Garcés, indicó que una de las principales decisiones adoptadas en la asamblea fue evitar cualquier confrontación con los simpatizantes del régimen, que desde el pasado lunes están apostados en las principales plazas y parques de la capital.

Publicidad

El manifiesto aboga por la defensa del agua, el rechazo a la política minera del Gobierno, el impulso de la reforma agraria y concesión de tierras, el acceso a varios servicios como educación y salud, y la derogatoria del decreto ejecutivo que se usó para despedir a miles de empleados del sector público.

César Vuelva, dirigente indígena de Chimborazo, señaló que estos puntos constituyen una exigencia a las autoridades para el cumplimiento de la Constitución y el buen vivir.

El director del Movimiento Popular Democrático (MPD) Luis Villacís aseguró que un importante porcentaje de manifestantes ya ingresó a la capital en buses de transporte interprovincial para concentrarse en El Arbolito, y que agrupaciones sociales, de estudiantes y profesores ingresarán desde el sector de San Bartolo, al sur de Quito, hasta el punto asignado, y de allí caminarán a la Asamblea y la Corte Constitucional para entregar el manifiesto.

La asambleísta Diana Atamaint (Pachakutik) denunció que existe la intención del Gobierno de impedir el paso de la movilización con tanques de la Policía, por lo que responsabilizó al presidente de la República, Rafael Correa, de eventuales agresiones. “Llegaremos a Quito como sea”, declaró.

Publicidad

El comandante de Policía de Mejía, Carlos Pozo, informó que 120 uniformados fueron desplazados a los diferentes accesos a Quito para brindar seguridad a los manifestantes.

Un helicóptero de la institución sobrevoló ayer la parroquia Uyumbicho.

Alrededor de las 14:40, varios caminantes salieron desde esa parroquia a través de caminos alternos y terrosos (llamados chaquiñanes), rumbo al sector de Santa Rosa, por la Panamericana Sur, y luego de tres horas de andar arribaron al sector de Guamaní, escoltados por patrulleros de la Policía Nacional y un helicóptero.

En el camino se incorporó el expresidente de la Asamblea Constituyente y exmilitante de Alianza PAIS Alberto Acosta y una delegación de la Unión Nacional de Educadores.

Esta marcha estuvo encabezada por los presidentes de la Conaie y de la Ecuarunari, el delegado del Frente Unido de Trabajadores (FUT), Mesías Tatamuez, y la titular de la Confederación de Barrios de Quito, Natasha Rojas. También llegaron asambleístas de oposición, como Nívea Vélez (ARE) y Diana Atamaint (PK).

Al arribar a Guamaní sumaron más de 2.000 personas.

Más caminantes: Apoyo a marcha indígena
Trasbordo en Pastaza
La Policía detuvo ayer a uno de dos buses que llevaba desde Zamora Chinchipe a unos cuarenta participantes para la marcha indígena. En el control de Mera (Pastaza) se frenó el avance del vehículo por no contar con el permiso de circulación. Sus ocupantes siguieron su viaje, tomaron buses en la terminal de Puyo. Otro grupo de la comunidad de Sarayaku inició su traslado la madrugada de ayer.

Adhesión de abogados
La Federación Nacional de Abogados anunció que unos 2.500 abogados se unirán a la caminata “pacífica por la vida y contra la prepotencia”.