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MÓNACO.- El Barcelona sumó ayer su decimosegundo trofeo bajo el mando de Pep Guardiola al derrotar 2-0 al Porto en la Supercopa de Europa, con un gol del Lionel Messi y otro del recién llegado volante Cesc Fábregas.

Messi, coronado el jueves pasado como mejor futbolista de Europa de la temporada pasada, volvió a brillar con una gran definición frente al arquero poco antes del descanso y una lujosa asistencia a Fábregas para el segundo gol cerca del final del compromiso.

En los tres partidos oficiales que el Barça jugó esta temporada -incluidos dos por la Supercopa española-, la Pulga hizo cuatro de los siete tantos catalanes y dio dos pases gol.

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Tras un buen arranque en que logró meterle presión al mediocampo del Barcelona, el Porto se quedó sin piernas y en el segundo tiempo se desdibujó al sufrir las expulsiones de Rolando y, sobre la hora, del colombiano Freddy Guarín.

Guarín había cometido el error que llevó al primer gol de Messi a los 39 minutos, al puntear una pelota hacia el arquero Helton que el argentino, solo detrás de toda la defensa de Porto, interceptó y mandó a la red tras eludir al brasileño con un quiebre de cintura.

A los 88m, Fábregas aumentó al bajar de pecho y definir tras un pase bombeado de Messi por encima de la zaga lusa.

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La consagración deja a Guardiola como el DT más exitoso de la historia del Barcelona, cuando apenas inicia su cuarta temporada en el banquillo.