El director nacional de Salud, Juan Moreira, y representantes del mecanismo de coordinación PAIS, de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y de fundaciones para pacientes con VIH se reunieron ayer para dialogar sobre la irregular entrega de antirretrovirales en el último mes.

Durante el encuentro los asistentes le preguntaron a Moreira cómo no se pudo prever el desabastecimiento de medicina y qué va a pasar con los pacientes que se hagan resistentes por haber interrumpido sus tratamientos. Pero el directivo no aclaró las interrogantes.

Moreira mantuvo su postura de que no hubo un desabastecimiento, sino un desfase en la entrega de los esquemas; sin embargo, los pacientes le recordaron que ellos no tomaron la medicación durante varios días y él constató que en el almacén general, en el norte, no había Efavirenz, ni Lamiduvina.

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También le pidieron que se estipule medicina para cuántos días se les debe entregar, porque muchos de ellos han perdido sus trabajos debido a que acuden constantemente a los hospitales para pedir los antirretrovirales. Pero no se determinó un mínimo de días.

El delegado por las ONG que trabajan sobre tuberculosis ante el mecanismo de coordinación PAIS, Carlos Rojas, solicitó al directivo que se realice un estudio que evidencie el impacto de adherencia (resistencia) en los enfermos por interrumpir sus tratamientos. Moreira tampoco señaló si lo haría.

La reunión terminó con la promesa de un nuevo mecanismo para informar el avance del proceso de compra de la medicina.