Los ecuatorianos en España no comprenden por qué en la Consulta Popular no se incluyó una pregunta que dé respuesta al problema de los hijos de inmigrantes que nacen en ese territorio y no pueden obtener la nacionalidad del país europeo.

Este es uno de los argumentos de los que se sirve el Frente Unido de Ecuatorianos en el Exterior por el No (aglutina a representantes en la Península del Prian, MANA, Sociedad Patriótica, MPD y Movimiento Honradez Nacional así como a miembros de la sociedad civil) para argumentar que el Gobierno no ha cumplido con el colectivo inmigrante.

Los cambios constitucionales que sacó adelante tres años atrás el presidente Rafael Correa han supuesto un verdadero lastre para cientos de familias afincadas en la Península. El artículo 7.2 de la Carta Magna establece que son "ecuatorianos por nacimiento las personas nacidas en el extranjero de madre o padre nacidos en Ecuador y sus descendientes hasta el tercer grado de consanguinidad". Los hijos de los inmigrantes no obtienen la nacionalidad española de origen si nacen en España desde octubre de 2008. Son ecuatorianos de manera automática. Esto les impedirá beneficiarse en el futuro del "arraigo familiar", nuevo precepto del reglamento que desarrolla la Ley de Extranjería que acaba de aprobar el Ejecutivo socialista.

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En virtud de esta figura los inmigrantes indocumentados con hijos menores de edad españoles podrán acceder a un permiso de residencia. Esta posibilidad está vetada para los progenitores ecuatorianos "sin papeles".

Juan Carlos Lucero, presidente de la Federación Nacional de Ecuatorianos en España (Fenadee), cree que el "Gobierno de Correa ha desperdiciado una oportunidad histórica para enmendar un error que cometieron los asambleístas de su Movimiento".

Raúl Jiménez, portavoz de la Asociación Rumiñahui, comparte esta postura por "el gran número de inmigrantes a los que afecta esta situación" (a lo largo del año pasado, solo el consulado en Madrid inscribió a 4.191hijos de padres ecuatorianos. En enero sumaron 307).

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Lorena Escudero, secretaria Nacional del Migrante, reconoce a este Diario que plantearon la cuestión pero "la consulta tenía demasiada complejidad para poner un tema tan sensible ante un sí o un no. Creímos que no era el momento político para hacerlo pero es un tema que está dentro de nuestras preocupaciones". La inclusión de una pregunta relacionada con el tema habría generado, en opinión de Lucero, "mayor interés de los inmigrantes en participar en el plebiscito". Los niveles de ausentismo entre los votantes en España impresionan. En las últimas elecciones presidenciales, 81.251 inscritos (59,2%) no acudió al llamado a las urnas. En la designación de parlamentarios andinos, ocho de cada diez prefirió quedarse en casa.

El ibarreño Mesías Orozco no sufragará el 7 de mayo. No ha escuchado hablar de la consulta. Su prioridad es otra: encontrar un trabajo. Lleva un año viviendo de la venta ambulante. Tiene tres hijos y una esposa también desempleada.