Hoy termina el plazo para que los accionistas del sistema financiero dejen de tener inversiones en medios de comunicación social.

El segundo inciso del artículo 312 de la Constitución de la República prohíbe la participación en el control del capital, la inversión o el patrimonio de los medios de comunicación social, a entidades o grupos financieros, sus representantes legales, miembros de su directorio y accionistas.

En ese sentido, el Estado en caso de incumplimiento de esta disposición desde mañana tendrá la facultad de enajenar esas acciones.

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Los casos más conocidos de vinculación de banqueros con medios de comunicación son los del Grupo Egas, con el Banco Pichincha y Teleamazonas; Grupo Eljuri, con el Banco del Austro y Telerama y el Grupo Caravana, con el Banco de Machala y Radio Caravana, Caravana TV, entre otros.

En una entrevista con este Diario, el principal accionista del Banco Pichincha, Fidel Egas, confirmó el traspaso de las acciones del canal de televisión a un fideicomiso manejado por Produfondos, cuyos titulares son un grupo de empleados, un grupo de amigos de Quito, un grupo de conocidos de Guayaquil, un grupo peruano y un grupo español (Mediapro).

La venta se la hizo a través de un fideicomiso.

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Egas también se deshizo de su participación en Dinediciones, que produce las revistas Diners, Soho, Gestión, Fucsia y una línea editorial, que fue vendida por más de medio millón de dólares a cuatro de sus colaboradores: Juana Ordóñez, Hernán Altamirano, Francisco Febres Cordero y Martha Pintado.

En esta empresa trabajan 70 personas, entre periodistas, personal administrativo, financiero y comercialización.

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Ordóñez, actual coordinadora editorial de Dinediciones, puntualizó que desde el viernes pasado las acciones de la compañía ya están a nombre de los nuevos propietarios. Los documentos correspondientes, con la nueva nómina de socios, ya reposan en la Superintendencia de Compañías.

La operación para la venta de estas acciones, según contó Ordóñez, se efectuó a través de un crédito directo del Banco Pichincha a diez años plazo y que será pagado a través de las propias utilidades que genere la empresa.

Sobre la venta de Telerama, hasta el mediodía de ayer a los trabajadores de la televisora en Quito no recibían ninguna notificación, pero desde hace un mes el pago de los salarios se realiza desde el Banco de Guayaquil y ya no desde el Banco del Austro, propiedad del Grupo El Juri.

Las negociaciones de estos medios de comunicación sufrieron modificaciones por los últimos cambios a las normas. El jueves pasado, la Junta Bancaria eliminó las disposiciones que permitían a los actores del sistema financiero tener el 25% de acciones en los medios de comunicación.

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Eso habría retrasado las negociaciones que realiza el Grupo Eljuri, según señaló un funcionario del canal, que pidió la reserva.

En relación al Grupo Caravana, la renuncia de Mario Canessa Oneto a la presidencia ejecutiva y representante legal del Banco de Machala le permitiría a él continuar al mando de sus medios de comunicación, siempre y cuando no posea acciones en la entidad financiera.

Canessa es yerno del presidente de la entidad financiera, Esteban Quirola.

Más datos: Disposición
Conatel
El pasado 7 de octubre el Consejo Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) emitió una resolución, en la que autoriza a la Superintendencia de Telecomunicaciones para que en el libro del Registro de Concesiones adhiera información sobre las transferencias de acciones o participaciones. Los obligados a desinvertir deben dirigir una solicitud a ese organismo indicando a favor de quiénes se realizó la transferencia de las acciones.