Una gran marcha universitaria solo pasó por la Asamblea. Su objetivo fue llegar al palacio de Gobierno para rechazar el veto presidencial al proyecto de Ley de Educación Superior y que entre por el ministerio de la ley sin las modificaciones que ese sector propone.

“Será inviable y nacerá sin legitimidad el proyecto de ley”, dijo Alejandro Ribadeneira, rector de la Universidad de Los Hemisferios, pues comentó que estas fueron “pisoteadas con el veto, es una humillación de los asambleístas que se agachan ante el poder del Presidente y dejan que todo pase por el ministerio de la ley, es una actitud vergonzosa, aquí el único legislador se llama Rafael Correa, los asambleístas de PAIS son alzamanos”.

Uno de los principales cuestionamientos es que la creación de la Secretaría Nacional de Educación Superior que ejercerá la coordinación con las universidades. Desde esa instancia –según el sector– se impondrán las políticas universitarias y se convertirá en un ente regulador de las universidades.

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El presidente del Consejo Nacional de Educación Superior (Conesup), Gustavo Vega, anunció que presentarán la próxima semana una demanda de inconstitucionalidad a esa ley una vez que entre a regir. Si esa acción no prospera en la Corte Constitucional el otro escenario es proponer reformas.

“La ‘U’ es del pueblo y no del gobierno”, coreaban los estudiantes por las calles. Desde su lado, reclaman que el veto les resta participación en el cogobierno y en la toma de decisiones del Consejo de Educación. “Los estudiantes no acatarán la ley porque es una imposición del Gobierno”, indicó Galo Mindiola, presidente (e) de la Federación de Estudiantes Universitarios (FEUE).

Mientras la marcha avanzaba a Carondelet se preveía que una comisión sea recibida por el presidente Correa, pero luego se anunció que sería recibida por un asesor. Eso provocó la ira de la FEUE que lanzó huevos crudos a la Policía que custodiaba fuertemente el palacio de Gobierno.

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Los trabajadores y empleados de las universidades Central, Cuenca, Estatal de Bolívar, Técnica Luis Vargas Torres y de las politécnicas de Manabí también protestaron por su inclusión como servidores públicos en otra ley. Antes se regían por leyes especiales vinculadas a cada universidad.

Según Samuel Valdiviezo, de la Federación Nacional de Trabajadores Universitarios y Politécnicos, al regirse por la Ley de Servicio Público perderán sus conquistas laborales como el subsidio por antigüedad.

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La academia anticipó que si sus pedidos no son acogidos en la redacción del proyecto final se sumarán al pedido de revocatoria del mandato a los asambleístas que se oponen a acoger los cambios propuestos.

Precisamente en medio de la protesta, Carlos Andrés Vera –hijo del activista político– del movimiento Evolución Democrática, recogió firmas para la revocatoria del mandato de Correa. En 20 minutos recogió 56 firmas en los formularios.

La universidad pública prevé reunirse este mediodía en la Estatal de Guayaquil.

El Gobierno anunció sanciones por los incidentes de ayer. Gustavo Jalkh, ministro del Interior, señaló que con una investigación que identifique a quienes cometieron esos actos o agredieron a uniformados, la Intendencia deberá actuar.

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“Si cometen infracciones o contravenciones la autoridad competente tendrá que tomar las medidas pertinentes”, dijo.

La acusación sería por una contravención.

Jalkh aseguró que esos hechos demuestran la poca altura con algunos manifestantes, frente a la tolerancia y prudencia de la fuerza pública.

Sobre las protestas de los servidores, aseguró que no habrá sanciones administrativas si los participantes en las marchas de protesta cumplen con sus horarios de trabajo.