“Allá ustedes, compañeros, si les creen a los dirigentes que los viven engañando”, dijo el presidente Rafael Correa al terminar su intervención en la comunidad de La Cocha, Cotopaxi, zona que visitó ayer por 45 minutos junto a varios ministros.

El Primer Mandatario se mostró descontento, pues no logró convencer a los moradores sobre la no aplicación de la justicia indígena.

En medio de la comunidad, donde han sido ajusticiadas varias personas, Correa señaló que la justicia indígena es para conflictos internos en el ámbito territorial, sin atentar a los derechos humanos y a la Carta Magna. “La Constitución prohíbe la tortura, ustedes creen que colgar a jóvenes, secuestrarlos primero, desnudarlos, bañarlos con agua helada... ¿ustedes creen que eso es justo?”.

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Hablando en castellano y a ratos en quichua y con un sombrero negro para protegerse del fuerte sol, añadió: “Tengan confianza de que aquí tienen un mashi (compañero), un amigo que vivió entre ustedes, nadie ha hecho más por el mundo indígena, vayan a ver las escuelitas, las casitas, los hospitales”, por lo que fue aplaudido.

Correa –con micrófono en mano– negó que el Gobierno pretenda privatizar el agua; “y cuando les llamen a cerrar carreteras, digan no, nosotros apoyamos el Gobierno de la Revolución Ciudadana”.

Pero Ricardo Chaluisa, a nombre de la comunidad, defendió la aplicación de la justicia indígena argumentando que está basado en los artículos 56, 57, 83, 171 de la Constitución y el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), además del Código Orgánico de la Función Judicial.

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Indicó que esa justicia se la aplica desde hace varios años, lo que despertó aplausos entre unos 150 indígenas presentes.

Dijo que en ningún momento se ha secuestrado a nadie, que el látigo significa que se da fuerza; la ortiga, una curación para sacar las maldades y el agua para purificar.

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Y le pidió a Correa: “Basta, basta, señor Presidente, los insultos al pueblo indio, cuando le habla al indio, incapaces, indios salvajes”.

El Jefe de Estado replicó de inmediato la intervención de Chaluisa tomando el micrófono y le aclaró que a quien le dijo incapaz y que miente es al titular de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador, Marlon Santi.

El ambiente se puso tenso a la salida de Correa porque varias personas lanzaron consignas contra el Mandatario en quichua, lo que le obligó a regresar con su seguridad e increpando a uno de los indígenas le dijo: “Mal dirigente”.

La comitiva presidencial siguió su trayecto por la carretera Pangua-La Maná.

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