AFP
MADRID, España.- 2.000 ecuatorianos perjudicados por la quiebra de la aerolínea Air Comet reclamarán un total de 2,5 millones de euros (3,34 millones de dólares) de indemnización, informó este lunes la oficina en España de la Secretaría Nacional del Migrante ecuatoriana (Senami).

La Senami presentará el martes "la demanda de 2.000 ecuatorianos perjudicados por Air Comet" en un juzgado de lo mercantil de Madrid que decidirá sobre el concurso de acreedores (antigua suspensión de pagos) de la aerolíea española, indicó en un comunicado.

En España presentaron una demanda 1.050 ecuatorianos y en Ecuador, 400, según la Senami, que explicó que "la cifra global de afectados asciende a 2.000 porque los menores de edad están representados por sus padres".

Publicidad

Cada persona reclama a la aerolínea un promedio de 1.200 euros, precisó.

Air Comet, que volaba desde España a varias ciudades latinoamericanas, presentó la suspensión de pagos en el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) el 23 de marzo por no poder hacer frente a su deuda, lo que permitirá que la justicia determine eventuales restituciones a los acreedores y afectados por la quiebra.

La aerolínea, que volaba desde Madrid a La Habana, Bogotá, Quito, Guayaquil, Lima y Buenos Aires, anunció su quiebra el 22 de diciembre después que un juez británico le prohibió volar tras una denuncia presentada por el banco alemán Nord Bank.

Publicidad

Tenía un impago por un crédito de 25 millones de dólares para alquilar los aviones y cesó su actividad dejando en tierra a miles de pasajeros, cuyo número no precisó.

Según los medios españoles, Air Comet deja una deuda de entre 100 y 160 millones de euros.

Publicidad

La Fiscalía investiga por fraude a la aerolínea tras la denuncia interpuesta por una organización de consumidores.

La empresa pertenece al grupo turístico español Marsans, al que también pertenecía Aerolíneas Argentinas, que tenía una deuda de casi 890 millones de dólares y fue expropiada hace un año por decisión del parlamento argentino tras el fracaso de las negociaciones para su venta al Estado argentino.

Su dueño, Gerardo Díaz Ferrán, quiere vender Marsans, según los medios españoles.