EFE
MADRID.- Más de 5,6 millones de inmigrantes se registraron en el padrón municipal español durante el 2009, de los cuales casi dos millones procedían de países latinoamericanos, según los datos del padrón municipal que publicó el Instituto Nacional de Estadística (INE) de España.

La cifra de inmigrantes inscritos en el 2009 fue de 5'648.671, lo que supone casi unos 400.000 ciudadanos extranjeros más que los 5'268.762 que había en el 2008.

Casi dos millones de ellos son originarios de América Latina y de América del Norte, mientras que otros dos millones y medio proceden de la Unión Europea. Según recoge diario El País, la comunidad rumana es la que más crece en España, con 67.076 registrados más durante 2009. Y también la más numerosa con 798.892 empadronados. Luego siguen Marruecos con 718.055 y en tercer puesto Ecuador con 421.426.

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Los mayores incrementos relativos se dan entre los paraguayos (con un 20% aproximadamente), los chinos (un 15,5%) y los peruanos (un 12,5%), según datos del mes de junio.

La cifra de ciudadanos extranjeros registrados en el padrón del 2009 se ha multiplicado por cinco en apenas una década; en el 2000, los ayuntamientos censaron solo a unos 923.000 foráneos.

El apunte en el padrón, un registro administrativo donde constan los vecinos de un municipio, constituye para los inmigrantes la llave de acceso a derechos como sanidad y educación; y se puede efectuar con independencia de que tengan o no residencia legal en el país.

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Una iniciativa reciente del ayuntamiento de la localidad española de Vic, en la provincia de Barcelona, de intentar impedir el registro de los extranjeros en situación irregular en España en el padrón municipal, desató la polémica entre las asociaciones de inmigrantes, los sindicatos y partidos políticos.

Otra localidad, Torrejón de Ardoz, en la provincia de Madrid y gobernada por el conservador Partido Popular (PP), tampoco empadrona a los extranjeros que tengan visado de turista o cuya vivienda no cumpla una serie de condiciones.

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Sistematizado desde 1996, el padrón español se actualiza constantemente, pero su problema fundamental es al contabilizar extranjeros, cifra que puede "estar sub o sobredimensionada", dice el director del Centro de Estudios sobre Migraciones de la Fundación Ortega y Gasset, Joaquín Arango.