Cuando Woodstock sucedía en una granja cerca de Nueva York, en la ciudad de  Bethel, en Ecuador el festival pasó casi inadvertido.  Guayaquil no pudo ver las imágenes completas del documental del  concierto  hasta después de dos años que, en el desaparecido cine Tauro (av. Quito y Luque) –en horario de matiné– estrenaron el documental del famoso concierto.

Filas interminables,  melenas, pantalones de blue jeans, camisetas psicódelicas y varios adornos eran exibidos por los rockeros y hippies locales en aquella tarde, relata José Arias, de 52 años, uno de los asistentes.

“Ya  dentro  del cine  se respiraba en el ambiente cierto olor característico de aquellos años, nadie podía parar esto”.  La gente  enmudeció cuando Crosby, Still & Nash con su tema Long time gone introducían  las imágenes del filme.

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Muchos grupos que participaron en el festival eran desconocidos aquí pero  se convirtieron en ídolos luego de la repercusión que tuvo el documental. “La sala  literalmente enloqueció  cuando apareció en  pantalla Joe Cocker interpretando el tema de los Beatles With A Little Help From My Friends”, con sus movimientos frenéticos y descoordinados, que daban la impresión de que algo sucedía dentro de su  cuerpo, relata Arias. Luego aparecieron The Who, Joan Báez y la inolvidable actuación de Carlos Santana,  quien con su mezcla de rock, soul y ritmos latinos “puso a la gente a bailar en las butacas causando un estruendo en la sala”. Al final, lo mejor:  Jimi Hendrix, con su famosa interpretación del himno de EE. UU.

A partir de esta época empezaron a surgir en  nuestro medio numerosas bandas que eran influenciadas especialmente por los guitarristas Santana y Hendrix,  e hizo que músicos como Tito Henzel, Héctor Napolitano, Gustavo Pacheco, Miguel Gallardo, Fernando Vicencini, Roberto Bolaños, entre  otros,  surgieran como expositores del movimiento rockero guayaquileño. Tocaban en las kermeses de colegios, en fiestas particulares y en pequeños locales.

“Nos enterábamos de lo que pasaba en el ambiente musical porque el familiar de algún amigo mandaba discos de Estados Unidos. Aun así, tuvimos la suerte de escuchar a Santana, a Janis Joplin, Led Zeppelin, Grand Funk y a otros que influyeron en nuestra música, comenta Roberto Bolaños, entonces integrante de Pussy Band.

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Los Corvets era el grupo más conocido y respetado con un sonido  excelente. Pero si de rock se hablaba, los más rockeros eran Las Barracudas, Los Apóstoles, Los Incógnitos y Pussy Band.

La mayoría de los grupos tocaba covers porque las disqueras lo preferían así. No confiaban en el producto nacional, refiere Bolaños.

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Pero Boddega sobresalió de entre los demás por tener temas inéditos. Gustavo Pacheco, integrante del grupo cuenta que los 70 fueron una etapa buena y mala para la juventud. “Lo mejor fue la música que nos trajo. Hendrix, Santana, Deep Purpple y Cream marcaron la vida de los jóvenes. El lado negativo es que para muchos fue imposible evitar el consumo de drogas. Estas venían de la mano con el rock”. Luego de un breve paso por Los Picapiedras crea  Los Incógnitos, en su etapa más rockera. “Cuando eres adolescente  quieres gritar aunque no sepas por qué ni a quién. El sonido de la guitarra distorsionada es igual a ese grito”.

En 1971 se unió a Boddega, donde la música era  “menos fuerte”, indicó. En Quito y Cuenca también comenzó el movimiento rockero con bandas como Las Hormigas –donde cantaba Jinsop– Tarkus, Los Cuervos, Los Delfines, etc.

A mediados de los 70 la generación Woodstock empezó  a desaparecer, el movimiento hippie  moríría para dar paso a nuevos ritmos. La mayoría de los rockeros de la ciudad optaron por  la música comercial.

Los artistas
15 de agosto. El concierto empezó  a las 17:08  con Richie Havens. Le siguieron Swami Satchidananda, Country Joe McDonald, John Sebastian, Sweetwater, Incredible String Band, Bert Sommer, Tim Hardin, Ravi Shankar, Melanie, Arlo Guthrie,  Amazing Grace y  Joan Báez.

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16 al 17 de agosto. Tocaron Quill, Keef Hartley Band, Carlos Santana, Canned Heat, Mountain, Janis Joplin, Sly & The Family Stone, Grateful Dead, Creedence Clearwater Revival, The Who (tocaron 24 canciones) y Jefferson Airplane. Su concierto es considerado como uno de los momentos más memorables de la historia del rock.

17  al 18 de agosto. Joe Cocker comenzó a las dos de la tarde. Siguieron The Fish, Ten Years After, The Band, Blood, Sweat & Tears, Johnny Winter, Crosby, Stills, Nash & Young, Paul Butterfield Blues Band,  Sha-Na-Na  y Jimi Hendrix, quien tocó a las 9 de la mañana del lunes.

Lo vieron  más de 400.000 personas. El recital duró dos horas, siendo el concierto más largo de su historia.

Tocó 18 canciones, concluyendo con Hey Joe..