En medio de un fuerte resguardo policial,  Alejandro Avilés asumió la administración tras establecer contacto con los ejecutivos que manejaban la compañía, que el año pasado tuvo ventas por $ 25 millones.

Cerca de las 18:30 los empleados de la fábrica, declarados en huelga desde el domingo pasado, se retiraron de las instalaciones aduciendo que mantenían  la medida. La Policía los resguardó sin  inconvenientes.

Por la mañana, Francisco Alarcón Alcívar, hijo de un ex miembro del directorio de Filanbanco, que lleva el mismo nombre, aseveró que la empresa le pertenece a él y a su hermana, María Gloria Alarcón.

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Posesionado en la administración y sin la presencia de los empleados, Alejandro Avilés afirmó que la incautación se efectuó bajo la presunción de que es una empresa vinculada al grupo Isaías. Además garantizó la estabilidad laboral. 

En tanto, la ministra de Finanzas y presidenta del directorio de la AGD, Wilma Salgado, aseguró  que la Junta Bancaria fue la entidad que estableció las vinculaciones del grupo Isaías con las empresas incautadas recientemente.

Esto, después de que el fin de semana se incautaron otras firmas que no estaban incluidas en la lista que detalla  la resolución de la AGD, entre ellas Toni y Plásticos Ecuatorianos.