Nació a comienzos de los años treinta del siglo pasado en la selva oriental del Ecuador. Como miembro de la tribu Huaorani, creció en una de las más violentas sociedades conocidas por la antropología. Cuando era joven, su familia fue aterrorizada por un guerrero huao llamado Mopia, que atacó y dispersó a su familia. En una ocasión, su padre fue mortalmente herido en un ataque. Esto impulsó a Dayuma a huir de su tribu con otras dos chicas para irse a vivir con los más pacíficos quichuas. Su familia le pidió que no fuera, creyendo que todos los extranjeros eran caníbales, pero Dayuma estaba convencida de que sus posibilidades de sobrevivir serían mayores si se iba.

Un día, al salir de la selva y encontrar un río, Dayuma vio un grupo de extranjeros que bajaban siguiendo la corriente en canoas. Los hombres levantaron sus armas para dispararle, pero por alguna razón no lo hicieron. Entonces Dayuma se volvió y pidió a sus compañeras que la sigan. Aquella fue la primera vez que usaron ropas, ya que los huarona vivían prácticamente desnudos.

Dayuma vivió fuera del territorio huaorani por muchos años, en una hacienda. En el lugar había muchos quichuas y gente de otros lugares. Ocasionalmente intentó asimilarse a la lengua y la cultura quichua y de ese modo se hizo amiga de una misionera norteamericana llamada Rachel Saint que tomó interés en aprender la lengua huaorani, también llamada “Huao Terero”. Esta lengua no está relacionada con ninguna otra conocida en la Tierra y nunca había sido estudiada antes. Dayuma fue una gran ayuda para Rachel, a pesar de que había olvidado mucho de su idioma natal y no hablaba inglés.

En 1955, Jim Elliot, junto con otros misioneros incluyendo el hermano de Rachel, Nate Saint, hicieron planes para contactar a los huaorani. Se reunían con Dayuma cuando Rachel viajaba para aprender huaorani. Cuando arribaron a territorio huaorani a comienzos de 1956, encontraron tres huaos amistosos, un hombre y dos mujeres. Una era la hermana de Dayuma, Gimade, que quería averiguar qué había pasado con su desaparecida hermana. Dos días más tarde, los hombres fueron asesinados por un grupo más numeroso de guerreros huao, incluyendo algunos familiares cercanos de Dayuma.

Mientras permaneció en la hacienda y trabajó de cerca con Rachel Saint, Dayuma se convirtió al cristianismo. Rachel Saint comenzó a enseñarle más sobre la Biblia y Dayuma continuó enseñándole a Rachel su lengua.

Más adelante, en 1958, dos mujeres de la tribu de Dayuma vinieron a contarle que su madre Akawo todavía vivía. Dayuma partió con ellas, pero pronto volvió al pueblo quichua con una invitación para Rachel Saint, Elisabeth Elliot y su hija de 3  años, Valerie, para que vayan a vivir con ellos.

Así comenzó el primer contacto pacífico con la tribu Huaorani. Dayuma fue muy importante para convertir a muchos de sus familiares al cristianismo. Dice Elisabeth Elliot: “Dayuma fue la predicadora”. Las enseñanzas del cristianismo tuvieron un efecto en el largo plazo en la tribu, sobre todo porque los homicidios se redujeron al menos el 90%.

Dayuma también había aprendido a coser mientras vivió con los quichuas y confeccionó ropa para su pueblo. Dayuma todavía vive con los huaorani en el pueblo de Tonampade, que está muy cerca donde los cinco misioneros fueron asesinados en 1956. Allí también se encuentra el sepulcro de Rachel Saint.

* www.wikipedia.org