"Creo que tengo un colchón (que me sostiene) por el Mundial pero sé que estoy más cerca de caerme de la cama hoy", dijo el seleccionador al ser consultado sobre por qué no ha sido despedido tal como habría sucedido en otros países, tras los resultados.

"En su momento me echarán. Yo creo que todavía me están dando una cierta larga", agregó Suárez en una entrevista con el canal de televisión Ecuavisa.

Aclaró que no renunciará pues la responsabilidad es compartida y no sólo suya.

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Las críticas arreciaron luego de la derrota por 1-0 ante Venezuela y la goleada de 5-0 por parte de Brasil, que ubican a Ecuador en el fondo de la tabla de posiciones, con cero puntos y seis goles de diferencia en contra.

Ecuador evidencia una mala racha desde la Copa América, donde no obtuvo ningún triunfo.

Suárez consideró que ha concluido el ciclo que llevó a Ecuador a los dos pasados mundiales, pues ahora hay más exigencias, por lo que el momento es diferente para el fútbol del país.

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En el orden técnico afirmó que la solución para el gran problema que atraviesa el combinado tricolor, que es la falta de definición, será mejorar en dinamismo, buscar más velocidad y conseguir más volumen de ataque, incluso desde el medio campo.

Sobre una posible convocatoria al ex goleador de la selección, Agustín Delgado, quien renunció a su participación, indicó que lo hará siempre que exista la voluntad del delantero para regresar.

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Delgado señaló que podría retornar a la selección en el 2008.