Estudiante mató a un compañero en plantel

El agresor disparó a la víctima mientras estaban en el patio del colegio nocturno 22 de Enero.

Un estudiante fue asesinado por otro compañero mientras se encontraban en el colegio fiscal nocturno 22 de Enero, ubicado en las avenidas Adolfo H. Simmonds y Barcelona (sur de Guayaquil).

El occiso fue identificado como David Johnatan Monroy Montaño, de 16 años, mientras que el agresor, según el reporte policial, es Luis Flores Abba, de 18.

El hecho se produjo alrededor de  las 20h00 del miércoles pasado en el patio del plantel, supuestamente luego de una discusión que mantuvieron  ambos jóvenes.

Agentes de la Brigada de Homicidios de la Policía Judicial del Guayas investigan las causas del crimen.

Aparentemente Flores sacó un arma de fuego e hirió a Monroy con un disparo en el abdomen.

La víctima fue llevada a una clínica en donde no lo atendieron, según comentaron sus familiares.

Luego lo llevaron al hospital del niño Francisco de Ycaza Bustamante, donde se comprobó su muerte, agregó el padre del menor, Henry Monroy.

Óscar Flores, inspector del colegio nocturno, manifestó a los miembros de la Policía Judicial que el estudiante muerto cursaba el primer año y que el agresor estaba en segundo.

Monroy indicó que su hijo  era tranquilo y que jamás tuvo problemas con nadie; incluso los ayudaba a atender un negocio de comidas.

“No entiendo las razones por las que mi hijo fue asesinado. Lo único que me enteré es que en una ocasión hubo una pelea con el agresor y David le ganó”, explicó.

El fallecido era soltero y estudiaba por las noches con la finalidad de trabajar en el día y ayudar a sus progenitores.

Tomás Montaño, tío del decesado, indicó que se desconoce el paradero del supuesto asesino. “Solo se sabe que huyó minutos después de disparar a mi sobrino y que su familia lo esconde para que no sea detenido”, señaló otro familiar.

La Policía recomienda a las autoridades de los planteles educativos realizar requisas constantes para prevenir el uso de armas entre los estudiantes.

“Los profesores deben registrar sorpresivamente a los alumnos y así evitar los enfrentamientos”, dijo una fuente de la institución.