El ganador del mayor premio en la historia de la lotería sueca ya  sabe en qué quiere invertir los 13 millones de euros que obtuvo: fichar a Zlatan Ibrahimovic para el club local. El afortunado, un hombre de 36 años y desempleado, es aficionado del Gute Visby de la isla de Gotland que consiguió el ascenso a Segunda B y quiere regalarle a su equipo al delantero del Juventus.