Uno de los jugadores referentes de la historia del D. Quito, el uruguayo Héctor De los Santos, observó el partido entre Ecuador y Uruguay jugado el pasado sábado desde el palco del estadio Olímpico Atahualpa.

El ex futbolista confesó que sintió que “el corazón se le dividía”  y calificó como  justo el empate a 0, que le permitió a la Tricolor clasificar al Mundial y a Uruguay mantener su aspiración de ganar el cupo del repechaje.

De los Santos, más conocido  como el Pototo, se reencontró con otros compatriotas, con quienes logró el título de 1968 para los chullas. Saludó con el ex portero Luis Aguerre (empresario de jugadores) y el ex delantero Víctor Manuel Battaini.

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De los Santos, hoy copropietario de La Suiza, una empresa de embutidos, dijo que el partido fue angustiante.   Que Uruguay se plantó bien, comandado por la estrategia del técnico Jorge Fossati.

Así como de Los Santos, el charrúa Gabriel García, jugador de Liga (Q), manifestó “que hubiera firmado el empate antes del partido” por la amistad que tiene con seis de sus compañeros que pertenecen a la Tri y por el cariño que siente por Ecuador.

El Gabo sufrió, pero finalmente su selección sacó un punto, ahora solo espera el clásico del Río de la Plata.

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Francisco Bertocchi, quien es un símbolo de Liga (Q)  por ser parte del primer campeonato albo y vive hace 20 años en la Capital, también vivió el encuentro con una sensación encontrada. Celebró la clasificación de Ecuador y dijo que pesó mucho la experiencia y el conocimiento del estratega Fossati sobre la Tricolor. “Fue un resultado justo”, manifestó al final.