Estados Unidos apoya una negociación de paz entre el  gobierno colombiano y los paramilitares de extrema derecha, aunque mantiene el  pedido de extradición de los líderes de estos grupos, dijo el miércoles una  alta fuente de Washington en Bogotá.
 
El subsecretario norteamericano de Estado para Asuntos Políticos, Marc  Grossman, dijo en conferencia de prensa que se había reunido con el comisionado  de paz de Colombia, Luis Carlos Restrepo, con quien trató el tema de las  negociaciones con una importante facción paramilitar.
 
"Lo que él me enfatizó fue que Colombia desea tomar uno de estos grupos  ilegales y sacarlo del combate, y eso es algo que apoyamos", señaló Grossman,  en la sede de la embajada de Estados Unidos.
 
"Le dije que apoyábamos este esfuerzo de paz, tal como hemos apoyado los  esfuerzos de paz en el pasado en Colombia", añadió.
 
Grossman señaló que su país tiene en este asunto un particular interés, ya  que las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), que reúnen al 70% de los  paramilitares (unos 13.000 hombres) y que manifestaron su intención de  desmovilizarse, son consideradas por Estados Unidos como una organización  terrorista.

Además, indicó, allí hay líderes que están pedidos en extradición por  Estados Unidos, en referencia a Carlos Castaño y Salvatore Mancuso, jefes  político y militar de las AUC, respectivamente.
 
En referencia a la propuesta de Castaño de que se suspenda o congele la  solicitud de extradición para avanzar en el proceso de paz, Grossman indicó que  "nosotros apoyamos al Gobierno y su proceso de paz. Nosotros no hemos quitado  nuestra solicitud de encima de la mesa".
 
Grossman reconoció que durante su visita a Colombia, iniciada el martes, se  había tratado profusamente el tema del acuerdo bilateral relativo a la Corte  Penal Internacional (CPI).
 
Estados Unidos pide a Colombia firmar este acuerdo para exceptuar a todos  sus nacionales que trabajen en el país andino de entrar en la jurisdicción de  la CPI. Colombia señala que ya se firmó un acuerdo en ese sentido en 1962 y que  es suficiente.
 
"Estados Unidos respeta el hecho de que Colombia firmó el acuerdo de la  CPI, pero pedimos que Colombia respete el hecho de que nosotros no lo  firmamos", dijo.
 
"El propósito no es dar inmunidad a los ciudadanos de Estados Unidos, sino  decir que la jurisdicción de la Corte no se aplica a los estadounidenses. No  pienso que (con Colombia) vamos a llegar a un punto que dañe la relación,  pienso que nuestros expertos legales van a encontrar una solución", añadió.
 
Grossman, quien se reunió con el presidente, Álvaro Uribe, con la  canciller, Carolina Barco, y con la ministra de Defensa, Marta Lucía Ramírez,  expresó su satisfacción por los resultados obtenidos por Colombia en el último  año en la lucha contra el narcotráfico y el terrorismo.
 
"Ha excedido mis expectativas", señaló al respecto.