La pelea disputada a 12 asaltos en el Boardwalk Hall de Atlantic City (Nueva Jersey) demostró la decadencia de Holyfield, que nunca pudo con la velocidad del nuevo campeón, y le impidió conseguir un título por quinta vez en su carrera profesional.

Byrd no cayó en la trampa de Holyfield de convertir la pelea en un intercambio de golpes cuerpo a cuerpo, siempre lo mantuvo en la distancia y, con su movilidad de piernas, no le permitió que le entrase en la guardia para frustrar al ex campeón que mostró los efectos de la edad.

Holyfield falló constantemente con sus golpes, mientras que Byrd se aseguraba con los suyos el triunfo y la corona vacante, su segundo título mundial después del de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), que perdió en la primera defensa que hizo.

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“He demostrado durante toda la pelea que fui superior, que dominé a Holyfield y que siempre impuse mi estilo de boxeo”, declaró Byrd, de 32 años.

Holyfield, de 40 años, cuando intentó en los últimos asaltos conseguir el golpe que le diese el triunfo por nocáut recibió la respuesta de Byrd con un derechazo y varias combinaciones que le dejaron a punto de irse a la lona.

Los tres jueces encargados de la pelea vieron ganador a Byrd, con dos que le dieron una puntuación de 117-111 y un tercero que puso 116-112 a favor del nuevo campeón del mundo.

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“Pienso que la pelea ha sido muy igualada, pero los jueces quedaron más impresionados con los golpes que conectó Byrd y cómo se movió en el cuadrilátero y le dieron el triunfo”, comentó Holyfield. “Todavía no he pensado en la retirada y la derrota no cambia para nada mis planes de cara al futuro”, agregó.

Sin embargo, será Byrd el que tendrá la oportunidad de enfrentarse el próximo año con el ganador de la pelea que disputen por el título de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) Roy Jones y el puertorriqueño John Ruiz.

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La pelea careció de la emoción que tienen las del título de los pesos pesados, aunque Byrd conectó todo tipo de golpes y llegó con claridad al cuerpo y cabeza de Holyfield, que apenas tuvo una reacción en el undécimo asalto.